Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Un juez concede a un acusado de malos tratos la custodia de sus dos hijas

El magistrado y el fiscal, que le pide cinco años, desestiman la violencia machista porque no hay sentencia

Un juez concede a un acusado de malos tratos la custodia de sus dos hijas

Un juez de Alcoi ha otorgado la custodia de las dos hijas -de nueve y cinco años- de un matrimonio al padre, al que la Fiscalía pide 5 años y 9 meses de prisión por estar acusado de maltrato a la madre. La sentencia ha resuelto en este sentido con el aval del fiscal, porque en el caso por la violencia de género no hay sentencia y, además, entiende «preferible» que las niñas se queden con el padre, ya que la mujer tiene intención de abandonar la residencia familiar en Muro y marcharse a vivir a Castelló. Esta resolución ha suscitado estupor en la asociación ACOVIFA, que defiende a mujeres maltratadas de l'Alcoià-Comtat.

La pareja ya está divorciada, tras un final muy difícil. Poco después de que la madre solicitara el divorcio, en septiembre de 2013, el padre y un amigo acudieron a la casa, fuera de las horas de visita, lo que degeneró en una presunta agresión. Según el escrito de la Fiscalía, a cuyo contenido ha tenido acceso este diario, la mujer sufrió diversas lesiones, por las que incluso fue escayolada, que han provocado que se acuse al marido de tres lesiones de violencia de género, uno de lesiones sobre la mujer, un delito de violencia física y dos faltas de lesiones, por las que en total la Fiscalía pide 5 años y 9 meses de prisión.

Para la mujer también solicita cuatro meses, por haber arañado al marido el día de la presunta agresión. «¿Ya no tenemos derecho a defendernos? Y además yo no pude arañarle: me muerdo las uñas desde los tres años», manifestó a este diario.

El juicio tendría que haberse celebrado en un juzgado de lo Penal de Alicante, pero se ha aplazado en dos ocasiones -una por la falta de documentación y otra por la carencia de un informe forense-, por lo que se ha realizado primero la vista civil por la custodia de los niños. De acuerdo con la sentencia emitida, el padre se queda con la custodia de las niñas y la madre -que no trabaja- deberá pagar 150 euros al mes por cada niña por la manutención. El régimen de visitas fija tres fines de semana al mes para la progenitora y uno para el padre.

En sus consideraciones, el juez entiende que en «la alegación sobre malos tratos, aún no ha recaído sentencia penal firme, por lo que por el momento los meros indicios no pueden servir de elemento que impida la custodia paterna», según la documentación a que ha tenido acceso este diario. Con respecto a la intención de la madre -originaria de Altea y que carece de familia en esta zona- de trasladarse con su actual pareja a Vall d'Uixò, en Castelló, el juez entiende «preferible la custodia paterna porque los menores tienen su entorno en Muro, lugar donde han ido al colegio y tienen su grupo de amistades».

Igualmente, el juez argumenta en sus consideraciones que la entrega al padre evitaría la «alienación parental influida por la madre», esto es el Síndrome de Alienación Parental (SAP), que, según esgrime la progenitora «no reconoce ninguna instancia ni organización médica». Según la madre, tampoco ha tenido en cuenta la voluntad de la hija mayor que declaró que «quiero estar con mi mami» durante el juicio. Hay que significar que los tres informes psicológicos emitidos durante el juicio por acusación, defensa y peritaje judicial, han sido en general contradictorios.

La sentencia ha sido recurrida a la Audiencia, aunque se prevé que pueda ejecutarse en breve plazo. «No entiendo que me quiten las niñas, no lo entiendo», reiteró. Por último, la afectada afirma que «me he sentido humillada y vejada por mi exmarido, que ahora sólo quiere perjudicarme con lo único que me queda y lo que más quiero que son mis hijas».

Compartir el artículo

stats