«¡A la mierda! ¡Váyanse a la mierda!» El diputado socialista Francesc Signes recordó ayer desde la tribuna de las Corts la acción de Labordeta en el Congreso antes de repetir las palabras del cantautor fallecido dirigidas a los parlamentarios del PP. Lo hizo en el debate sobre la petición de EU para que se reabra la comisión de investigación del accidente del metro de Valencia, después de que el popular Alfredo Castelló acusara a la oposición de insistir en este asunto («lo han propuesto 21 veces») porque buscan «recalentar» y generar «crispación, abusar del dolor de las familias e incitar el odio hacia el PP». Y ello para sacar «un puñado de votos». «Una forma de hacer política muy próxima a un montón de basura», asestó, antes de que los 47 votos del PP tumbaran, por decimosexta vez en ocho años, la petición, apoyada por 41 sufragios de la oposición.

«Despreciable», tachó Juan Ponce (Compromís) la intervención de Castelló, mientras Marga Sanz, de EU, replicó que en este asunto «la sangre la provocan» los populares «al no dar respuesta a las víctimas y sus familias». «Con tanta indecencia y tanta miseria, solo les puedo decir las palabras que dijo Labordeta: ¡A la mierda! ¡Váyanse a la mierda! ¡Estamos hablando de 43 muertos y 47 heridos, de dolor, de familias, de muertos, no pueden hablar con la demagogia que han traído aquí!», clamó Signes entre las protestas del PP. El presidente, Alejandro Font de Mora, pidió «corrección», ya que «primero se falta en las formas y luego se falta a la convivencia». Posteriormente, el síndic del PP, Jorge Bellver, intervino para decir que iba a pedir a Signes que retirara sus palabras pero «valorándolo, creo que es mejor no pedir la retirada y que consten en el diario de sesiones».

Durante el debate, Sanz enfatizó que a las familias se les debe «una reparación». «¿A qué esperan para pedir perdón?», inquirió al PP, para añadir que no lo hace «porque comportaría asumir responsabilidades políticas». Sanz, tras tachar de «paripé» la comisión de investigación de 2006, recalcó que hoy «conocemos muchas más cosas que demuestran que todo fue un montaje», como el «amaño» de las comparecencias pero también «los tres descarrilamientos de la primera unidad que fueron ocultados, la misteriosa desaparición del libro de averías, el borrado de la caja negra o la falta de mantenimiento».

Signes, afectado, cita a Garrote

«Desde lo más profundo de nuestro corazón, con toda nuestra sinceridad, queremos hacer llegar nuestro dolor y solidaridad a las víctimas. Nuestras condolencias más profundas y un abrazo fuerte», había arrancado su intervención Castelló, quien sostuvo que ya hubo una comisión «seria» y «arrojó» las mismas conclusiones a las que «hasta ahora ha llegado la Justicia: Solo hay un responsable, el conductor, y el exceso de velocidad fue la causa». Ponce, quien regaló a Castelló un ejemplar de «Lluitant contra l'oblit», de Laura Ballester, redactora de Levante-EMV, lo cuestionó. Signes, emocionado, citó palabras de la presidenta de las víctimas, Beatriz Garrote. «Responsabilidades, no condolencias» piden las víctimas, aseveró Signes.