El escándalo del cobro casi íntegro de la extra de 2012 por los diputados de las Corts abrió ayer una grave crisis en el grupo socialista, donde el portavoz adjunto y exrector de la UJI, Francisco Toledo, estalló. Toledo, fichaje estrella en los comicios de 2011, escribió un largo mensaje en el grupo de «Whatsapp» de la dirección y de los parlamentarios socialistas en el que señaló que, tras «el indecente 'show' de la paga extra», alguien ha de «asumir responsabilidades» en el PSPV. Una exigencia de dimisiones que, aunque Toledo no puso nombres y apellidos, va dirigida hacia el síndic, Antonio Torres, y hacia la vicepresidenta segunda de la Mesa de las Corts, Ana Barceló. «Yo he venido a trabajar en política, no a bailar el chachachá», aseveró Toledo, quien dejó claro: «Si nadie de los nuestros asume ninguna responsabilidad, yo no seguiré en política la próxima legislatura y dejaré el partido para poder denunciar con toda libertad y dureza, no como en este escrito, esas prácticas que nada tienen de honrado ni de izquierda».

El número dos traslada a sus compañeros que «no ha participado en ninguna de las decisiones» de la paga, «pero como vosotros soy sufridor» de ellas. «¿Asumirán algún tipo de responsabilidad o pedirán perdón las personas de nuestro partido que sí las han tomado? Por como se están desarrollando las cosas parece que esas palabras no figuran en su diccionario», lamenta, para añadir: «Parece que todo se arregla devolviendo deprisa y corriendo lo que por arte de birlibirloque ha aparecido en nuestras cuentas. Parece que la culpa fue del chachachá que el PP les enseñó a bailar». «Pero „prosigue„ sabemos que no es así, que hay quien nace sabiendo bailar chachachá y lo lleva bailando toda la vida».

Enfatiza que si están «en un partido serio», está «dispuesto a seguir en política, en el frente o en la retaguardia». «Pero si me piden que baile el chachachá, que nadie cuente conmigo». Añade que ha devuelto la extra pero «eso no es suficiente». Regenerar la política, dice, supone «desterrar el chachachá», que, como dice la canción, recuerda, «a uno que lo bailó 'le volvió un caradura por la más pura casualidad'», concluye el mensaje, que envió al secretario general, Ximo Puig.

Exigen explicaciones

Desde el PSPV se le replicó que Puig reaccionó tajante ordenando la devolución de la extra. El mensaje cayó como una bomba. Torres aseguró que hoy estará en su despacho para dar explicaciones. Pero el diputado Josep Moreno consideró que el asunto es lo suficientemente grave como para haber reunido al grupo para explicar por qué se decidió el cobro de la extra. Fue una decisión política (la devolución) y no hay nada que explicar, contestó Torres. Modesta Salazar puso un «emoticón» evidenciando su desmarque. El enfado de muchos diputados era palpable.