Las medidas de discriminación positiva para facilitar el acceso de las mujeres al mundo de la política no son del agrado del PP, un partido que arguye que los cargos públicos deben ser para aquellos que están mejor preparados, sean hombres o mujeres. La realidad, sin embargo, es tozuda y ocurre que donde la ley no obliga a la paridad, son los hombres quienes ocupan los puestos claves y quienes mejor posicionados están a la hora de garantizarse su futuro. Prueba de ello es que la lista de hombres que tienen prácticamente garantizado un puesto de salida en las Corts es tan larga, como corta es la de las mujeres de las que se puede predicar lo mismo. De hecho, la ley de igualdad que obliga a la paridad en las listas está complicando al presidente Alberto Fabra la confección de unas candidaturas que, a tenor de los sondeos, darán cobijo a menos personas que hace cuatro años (unas 30 plazas frente a las 55 actuales). En Valencia, sólo Fabra y los consellers ( Llombart, Buch, Moragues, Santamaría) acaparan cinco puesto seguros de salida.
Contando al síndic Jorge Bellver; al portavoz de la campaña, Alfredo Castelló; y a Vicente Betoret por la cuota del barón Alfonso Rus son ocho las plazas de salida. Y si se añade algún nombre más de los que se dan como seguros „Miguel Domínguez o el presidente de NNGG, Juan Carlos Caballero„ las cuentas no salen. Y es que por cada nueve hombres Fabra debe poner como mínimo a seis mujeres. En la lista de Valencia, sólo tienen garantizada la plaza la alcaldesa Rita Barberá y la portavoz Maria José Català.
El «colapso» de varones por la provincia de Valencia podría obligar a Fabra a situar a algún conseller por otra provincia. Máximo Buch o Juan Carlos Moragues podrían acabar de cuneros. En todo caso, ambos irán en puestos destacados ya que el jefe del Consell quiere sacar pecho por la gestión en el área financiera y económica.
Con todo, siguen faltando mujeres con galones para ir en puestos de salida, lo que podría haber abocado a Presidencia a buscar a alguna independiente a pesar de que el partido había descartado acudir a fichajes como ha hecho el PSPV. Es más, la propia coordinadora general del PP y consellera Isabel Bonig, criticó en su momento las listas elaboradas por Ximo Puig y defendió que el PP tenía «cantera» propia.
Por otro lado, de las diputadas actuales por Valencia tienen posibilidades de conservar el escaño Verónica Marco y Sagrario Sánchez, aunque podrían quedar en tierra de sufridoras. También la exconsellera Maritina Hernández podría salvarse. Ambas son diputadas rasas, de ahí que tengan difícil estar entre las diez primeras. El problema añadido es que Fabra no quiere que los alcaldes vayan en listas para evitar la acumulación de cargos, lo que pone difícil las cosas a dirigentes locales con peso como Elena Bastidas, alcaldesa de Alzira, otro de los nombres barajados.
Así las cosas, Fabra estaría abocado a recurrir al segundo escalón. La mejor situada es su mano derecha en el Palau, Esther Pastor, quien se afilió recientemente al partido por Valencia, si bien algunas fuentes sostienen que no irá a las Corts. En Castelló, cuya lista encabeza Isabel Bonig , se da también la circunstancia de que la renovación que preparan el barón de Castelló, Javier Moliner, y Fabra sacará del escaño a mujeres destacadas como Marisol Linares o Maria Fernanda Vidal o Maira Barreiras. Podría continuar Nieves Martínez y entrar Beatriz Gascó, alto cargo en Educación. En Alicante, Císcar ha pedido entrada a la eurodiputada Eva Ortiz.
Según fuentes del PP, Fabra cerrará las listas este fin de semana y es probable que las deposite en la Junte Electoral el primer día en que se abre el plazo, es decir, el próximo miércoles. Como le pedía Génova, ya ha hablado con los barones e incluso se ha reunido con alguno de ellos. Ya tiene la lista de sugerencias de José Císcar, Alfonso Rus y Javier Moliner y será él y su equipo más próximo quienes acaben de encajar todas las piezas. Fabra ha pedido discreción a todos los responsables políticos y sólo unos pocos, de su círculo más próximo, conocen una lista que, al margen de si finalmente incluye algún fichaje, no deparará sorpresas aunque sí renovación respecto a las de 2011.
