El exsecretario y actual abogado del Ayuntamiento de Canet d'En Berenguer, José Antonio Sancho Sempere, y un alto funcionario del Consorcio de Museos, Rafael Parra, han sido detenidos en el marco de la causa abierta por un juzgado de Valencia por supuestos delitos de prevaricación, malversación, contratación prohibida a funcionario público y tráfico de influencias.

La juez del Juzgado de Instrucción 12 de Valencia ha tomado declaración a los dos detenidos y ha acordado para ellos prisión provisional, comunicada y sin fianza.

Estos delitos se habrían cometido desde el año 2013, cuando la Fiscalía interpuso la denuncia, según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, por malversación y prevaricación en la contratación de servicios de asesoría jurídica y económica

La detención se ha acordado después de que el Juzgado de Instrucción número 12 de Valencia haya recibido los informes de la Guardia Civil como consecuencia de los registros e intervenciones telefónicas practicados desde que se abrieron las diligencias, en 2013.

La causa está declarada secreta, aunque fuentes judiciales han señalado que en principio, no guardaría por ahora relación con la investigación abierta por otro juzgado valenciano sobre posible malversación de caudales públicos en Imelsa, empresa pública de la Diputación de Valencia cuyo exgerente Marco Benavent está imputado.

Canet tenía un 'plan B'

El alcalde de Canet d' En Berenguer, Leandro Benito, ha asegurado a Levante-EMV que el gobierno local ya tenía listo un «plan B» «por si pasaba algo» con el secretario, pero que daría más detalles a lo largo del día. De hecho, la intención de su equipo era reunir a los portavoces de la oposición antes del pleno previsto para esta misma tarde.

José Antonio Sancho nunca llegó a ayer a incorporarse a su puesto de trabajo de Canet y, en el ayuntamiento, la noticia de su arresto comenzó a trascender sobre las 11 horas. Esto pilló por sorpresa a la hija del secretario municipal que trabaja allí y que, poco después, «parecía haber desaparecido», como explicaban a este diario fuentes del consistorio. Tampoco había rastro de su hijo y actual jefe de la policía local de Canet.

En la oposición, la noticia suscitó numerosas incógnitas y cierto nerviosismo, al carecer de datos concretos y de si, finalmente, se podría celebrar el pleno previsto esta misma tarde.