El envío a prisión del secretario de Canet d' En Berenguer, José Antonio Sancho, impactó en la población y confirmó uno de los peores escenarios previstos en ese ayuntamiento, por más que ésta fuera ordenada por la juez de forma provisional, comunicada y sin fianza. Para muchos, fue la constatación del ocaso del hombre que, durante décadas había ejercido de verdadera autoridad local, por encima de otros políticos, como incluso apuntaba el actual alcalde Leandro Benito (PP), al hablar de mandatos anteriores. Sin embargo, no sorprendió del todo.

La noticia pilló a los ediles a media tarde en el pleno ordinario, que se celebró con una secretaria accidental nombrada inicialmente para varios días. El alcalde dijo carecer de datos oficiales y no se extrañó por la mañana por la noticia del arresto. Según admitió a Levante-EMV, «ya tenían previstas todas las alternativas posibles si se precipitaba la salida» del alto funcionario, sobre todo, desde que el Juzgado de Massamagrell abrió juicio oral contra él, la exalcaldesa de la Pobla y el otro alto funcionario de la provincia que al parecer fue detenido ayer.

Sin embargo, la confirmación de que se había decretado prisión para Sancho ratificó los malos augurios para un alto funcionario que además es padre del jefe de la Policía Local y de una Técnico en Gestión Municipal de Canet que ayer no ocultó su asombro al conocer su detención, al igual que otros trabajadores.

Está previsto que hoy el consistorio envíe un escrito a la Dirección de Administración Pública para pedir instrucciones sobre cómo proceder con el secretario, de acuerdo con todas las alternativas posibles. Así lo había acordado la junta de portavoces antes del pleno en una reunión extraordinaria y convocada especialmente para abordar ese asunto, a la vista de la confusión creada entre muchos concejales en cuanto empezó a trascender la noticia de la detención.