El sector del cigarrillo electrónico alude a «varios estudios» que aseguran que «los cigarrillos electrónicos son un 96% menos dañinos que el tabaco». Entre las investigaciones universitarias internacionales que defiende la Asociación Nacional del Cigarrillo Electrónico (ANCE) destacan dos ideas. «La inyección de nicotina en el cuerpo humano se reduce un 54% en el vapeo comparativamente con el fumar tabaco, lo que demuestra que vapear resulta mucho menos perjudicial que fumar tabaco con respecto a la inhalación de nicotina por calada fumada/calada vapeada», recoge el «Diario internacional de Recursos de Medio Ambiente y Salud Pública».

Otro artículo, de la revista «Elsevier Masson» (Universidad de Pierre et Marie Curie y Universidad de Paris Diderot), sostiene que el vapor del cigarrillo electrónico desaparece de la atmósfera en 11 segundos como máximo, mientras que el humo del tabaco tradicional tarda 20 minutos como mínimo en desaparecer de la atmósfera. «Lo que demuestra que el vapor del cigarrillo electrónico no es capaz de perjudicar a terceros que se encuentren cerca, ni en sitios cerrados, ni abiertos», afirma el estudio. p. c. valencia