Las temperaturas máximas han registrado hoy un descenso medio de catorce grados -aunque en algún punto ha sido de veinte- con respecto a la jornada de ayer, en la que se alcanzaron récords históricos de calor y se registraron máximas como los 44,4 grados de la localidad valenciana de Carcaixent.

No obstante, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha alertado de que el balance térmico de las dos primeras semanas de este mes de mayo "no tiene precedentes" en los registros climáticos de la Comunitat Valenciana, con una anomalía de temperatura que supera en 5,8 grados la media normal, y en algunas zonas es de siete grados más.

Respecto a las tres capitales de provincia, también han vivido el inicio de mayo más cálido desde que se tiene constancia documental, que en el caso de Alicante es desde 1856.

Durante la jornada de ayer, la temperatura media fue diez grados superior a lo habitual, lo que dejó un día incluso más cálido que cualquier jornada de agosto normal.

Ninguna localidad bajó de los 30 grados y se midieron registros históricos, con máximas de 44,4 grados en Carcaixent y por encima de los 40 grados en varios municipios, como Xàtiva, Valencia, Ontinyent, Elx, Orihuela o Rojales.

Además, dos indigentes fallecieron ayer en Valencia y en Xirivella, en el día de más calor registrado en el mes de mayo en la provincia de Valencia en los últimos 140 años.

El mercurio ha descendido en 24 horas una media de catorce grados en la Comunitat aunque ha sido más acusado en la localidad castellonense de Fredes (donde ha bajado veinte grados), en Valencia (con un descenso de dieciséis) y en el municipio alicantino de Xàbia, con quince menos.

El descenso térmico ha sido entre moderado (más de cuatro grados), notable (más de seis) y extraordinario (más de doce), y ha provocado que el mercurio haya marcado de máxima 30 grados, como en Xàtiva (ayer midió 42,9) y Rojales (Alicante), mientras que la temperatura diurna más baja se ha medido en Fredes (Castelló), con 13 grados.

En cuanto a las tres capitales de provincia, Valencia ha pasado de los 42 grados de ayer a los 25 de hoy, Alicante ha bajado de los 37 a los 30 grados, y Castelló de los 34,5 a los 27.

En la provincia de Castelló, Vinaròs y Segorbe se han quedado en los 25 grados; en la de Valencia Polinyà ha medido 28 y Oliva 23, y en la de Alicante Pinoso ha alcanzado los 26.

El fuerte calor registrado ayer en la Comunitat Valenciana, y en general los primeros quince días de mayo, puede afectar de forma negativa a los cultivos, ya que favorece la caída de los cítricos de los árboles y que los cereales, que están en el momento de la grana, se queden más pequeños o fallidos.

Así lo han indicado desde la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) y de La Unió de Llauradors i Ramaders, que no obstante han precisado que las consecuencias del calor tendrán que verse a largo plazo, aunque ya se puede hablar de repercusiones negativas.

La previsión es que el fin de semana sea tranquilo, con temperaturas cálidas, que mañana pueden descender en el litoral de Alicante, subir en el norte de Castelló y mantenerse en el resto, mientras que el domingo el termómetro experimentará pocos cambios en general.