El aspecto físico de Marcos Benavent ha cambiado respecto a sus últimas apariciones públicas y ha llegado a la Ciudad de la Justicia con ropa muy informal, una densa barba y numerosos pendientes y pulseras.

Benavent vestía una camiseta blanca estampada, chaleco negro y pantalones 'jodphur'. Todo ello aderezado con diversos tatuajes, pendientes, pulseras y anillos.

"Me gusta así, lo siento así", ha explicado sobre su aspecto. "Hago mis talleres, yoga, tantra, mis cosas... talleres de agricultura biodinámica, escucho sonidos de la naturaleza... mis animalitos...". Posteriormente ha añadido que le gusta tomar el sol, hacer siesta y comer comida ecológica: "esta pasada noche he dormido como un bebé".

Benavent ha reconocido haber pasado los últimos meses en el extranjero, en la zona amazónica de Ecuador, Japón y Holanda, desde donde tenía previsto "perderse" en la India, Nepal, Tibet y Bután, pero decidió volver a España al publicarse que había sido denunciado por los actuales gestores de Imelsa.

Tras una larga conversación con los periodistas, Benavent ha posado para los fotógrafos en varias posturas, haciendo caso omiso a las recomendaciones de su abogado, que ha tratado de retirarlo en varias ocasiones.