A pesar de la «colaboración total» de Marcos Benavent con la justicia, agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil de Madrid han registrado el despacho que el abogado del ex gerente de Imelsa tiene en Valencia, además del de Xàtiva. Un registro «facilitado» por la defensa de Benavent para demostrar que no ocultan nada a la justicia. La ratificación de Benavent ante la Fiscalía Anticorrupción de las conversaciones que grabó sería la clave de bóveda de la investigación que confirmaría las mordidas en el área de Cultura del Ayuntamiento de Valencia, la concesión de residencias, la construcción de VPO o la adjudicación de PAI. Benavent, como interlocutor y autor de las grabaciones, es la única persona que puede aportarlas para que tengan «validez judicial», como sucedió en el Caso Terra Mítica o el Caso Gürtel. l. b. valencia
