Una tormenta con granizo que permaneció estática prácticamente durante una hora sobre el noroeste de la comarca de Requena-Utiel dejó el lunes importantes destrozos en los cultivos e infraestructuras agrarias de esta zona, situada entre los municipios de Camporrobles, Sinarcas y Utiel.
El informe remitido al al Sistema de Notificación de Observaciones Atmosféricas Singulares (Sinobas) estima que una hora cayeron alrededor de 60 litros por metro cuadrado, gran parte de ellos en forma de granizo.
El resultado provisional fue de daños a cultivos en una superficie aproximada de 1.200 hectáreas„ 1.500, según la Asociación Valenciana de Agricultores-, caminos y bancales arrasados por la fuerza del agua y pequeñas inundaciones en Utiel, donde el río Magro estuvo a punto de desbordarse.
Otra tormenta, aunque menos virulenta, se centró en el sur de la comarca y dejó piedra de gran tamaño en algunos parajes de las pedanías de Los Duques, Casas de Eufemia y Campo Arcís, en el municipio de Requena.
La Unión de Agricultores en una primera estimación calcula que la tormenta que se registró en la zona noroeste de la comarca produjo pérdidas de «unos 4,5 millones de euros, de los cuales 2 corresponden al valor de las cosechas perdidas y el resto a los daños en infraestructuras».
La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA) elevó 1.500 las hectáreas de cultivos de viña y cereal dañadas por la tormenta de granizo. AVA estima que las consecuencias de este temporal pueden suponer un «duro golpe» para la economía de la comarca, por lo que pide «máxima celeridad» a la hora de efectuar las peritaciones de los daños y «rapidez» en el pago de los seguros.
Los cultivos los más perjudicados han sido las viñas, los cereales y los almendros y la extensión dañada es de «unas 1.200 hectáreas, de las cuales 700 habrán perdido la totalidad de sus cosechas mientras que en el resto, las mermas de producción oscilan entre el 30 y el 70% dependiendo de la ubicación de las parcelas» aseguran en la Unió. A todo esto hay que añadir cuantiosas pérdidas «por el arranque de árboles y cepas, en infraestructuras por la acumulación de gran cantidad de piedras, destrozo de emparrados, márgenes de piedra y también en infraestructuras rurales como caminos, puentes y encauzamientos de barrancos» según explica la organización agraria en una nota de prensa.
Por su parte, el sindicato COAG-Comunidad Valenciana estimó en unas 100 hectáreas de cultivos de la pedanía de La Portera en el municipio de Requena las que resultaron dañas por el pedrisco que se registró en la tarde del pasado domingo. Las pérdidas de producción en esta zona «están comprendidas entre el 30 y el %» concretaron las fuentes.
Los agricultores con viñedos afectados por el granizo tendrán que aplicar a las vides, tan pronto el terreno permita el acceso de los tractores, algún producto cicatrizante de las heridas que causó el impacto de las piedras, así como tratamientos preventivos contra enfermedades.
