Rita Barberá, alcaldesa de Valencia durante los últimos 24 años, renunció ayer a su acta de concejal y anunció su salida del ayuntamiento. Lo hizo apenas 24 horas antes de que sea proclamado alcalde el candidato de Compromís, Joan Ribó, un acto al que Barberá ya no asistirá. Según dijo, «esta etapa ha terminado» y ahora se inicia una nueva como presidenta del Grupo Popular en las Corts Valencianes, cargo con el que la ha premiado el aún presidente de la Generalitat, Alberto Fabra.

En medio de una gran expectación mediática y sin perder la entereza en ningún momento, Barberá explicó que justo a esa hora, sobre la 1 de la tarde, se estaba presentando en la Junta Electoral de Zona su renuncia al acta de concejal, un acta que no recogió ella personalmente pero que quiso retener hasta el último minuto ante las dificultades de los partidos de la izquierda para formar una coalición. De no haber mayorías, gobernaría la fuerza más votada, el PP.

«He intentado hasta el último momento „explicó„ cumplir lo que me han mandado los ciudadanos, que como fuerza más votada, es formar gobierno. Hemos hablado con los representantes del Partido Socialista y de Ciudadanos, pero no ha sido posible ese gobierno de moderación que yo creo que le convenía a la ciudad», añadió. Así pues, «acepto el resultado que han querido los valencianos y tendrán el Gobierno que ellos han querido tener», certificó.

En cualquier caso, la ya exalcaldesa de Valencia, de 67 años de edad, aseguró que no abandona la vida política. «Termina una etapa y empieza otra», concretamente en las Corts Valencianes, donde ha sido nombrada esta misma semana presidenta del Grupo Popular. «Allí es donde empecé», recordó, y ahora «es como volver a empezar».

De sus 24 años de mandato en la ciudad, Barberá afirmó que «ha sido la etapa más fructífera de su vida, «una etapa que justifica toda una vida». Y lo es «por el trabajo, por el bienestar producido a las personas, por la mejora de la ciudad y por la mejora de la sociedad». «Lo digo „añadió„ con fuerza, con orgullo y con satisfacción, porque nadie me puede quitar el honor de haber sido la alcaldesa de Valencia por más que muchos sigan en la tarea del daño personal, a mi familia y a mi prestigio».

Años de récord

En este sentido, Rita Barberá recordó que ha sido alcaldesa con «unos datos extraordinarios en democracia». «Han sido 24 años en el gobierno, el mayor número de votos absolutos, el mayor porcentaje de votos, ganar en todos los distritos y obtener el mayor número de concejales», lo que la llevó directamente a expresar su «inmensa y profunda gratitud a los valencianos». «Nunca les he engañado, si no he podido cumplir algo lo he dicho, y para ellos seguiré trabajando allí donde esté», enfatizó.

Aunque sus palabras sonaban a despedida, la exalcaldesa, envuelta en cámaras y rodeada de toda su corporación, aseguró que no venía a decir adiós. «Soy valenciana „dijo„, vivo cerca de aquí y seguiré atenta a todo lo que ocurra en Valencia y a todo lo que ocurra en España en un momento tan delicado como éste».

También tuvo palabras para el nuevo equipo de gobierno, al que apenas se refirió durante su larga intervención. Lo hizo para «expresar a la nueva corporación y al nuevo gobierno mi deseo de los mayores aciertos, porque será lo mejor para Valencia».

Llegada la hora de la salida, Barberá aseguró que no echará nada especialmente en falta, sólo el hecho de pisar cada día los azulejos que hacía su bisabuelo.