El exministro valenciano Jordi Sevilla se ha incorporado al gobierno en la sombra del líder socialista Pedro Sánchez. El exsecretario de Economía del PSOE y miembro del Gobierno de Zapatero será el encargado de coordinar el programa económico socialista con vistas a las próximas generales de noviembre. Sevilla se ha enrolado en un grupo de once expertos. El que fue secretario de política económica del PSOE desde 2000 a 2005 y ministro de Administraciones Públicas, entre 2004 y 2007, abandonó su escaño de diputado en septiembre de 2009 para trabajar de asesor en la consultora PricewaterhouseCoopers (PwC) y de profesor asociado en el Instituto de Empresa.

Jordi Sevilla tiene 59 años. Decidio dejar la política temporalmente tras distanciarse de las decisiones económicas que Rodríguez Zapatero (al que le garantizó que aprendería economía en dos tardes) empezó a tomar tras notarse los efectos de la crisis durante su segunda legislatura. Según el PSOE, el exministro estará al frente del área de Economía e Innovación y trabajará en coordinación con el actual secretario de Economía del partido, Manuel de la Rocha. Militante de la ciudad de Valencia, Jordi Sevilla, nunca ha tenido una vida activa como militante. Recorrió, con todo, agrupaciones del partido y mantuvo contactos con dirigentes y alcaldes cuando tuvo la pretensión de optar a ser secretario general del PSPV en sustitución del dimitido Ignasi Pla, quien tuvo que dejar el cargo en septiembre de 2007. Sevilla estaba dispuesto a presentarse a secretario general pero la operación naufragó totalmente porque diversas familias del socialismo valenciano cerraron filas y disuadieron al exministro de entrar en la carrera por liderar la formación del puño y la rosa. Ni siquiera llegó a presentar su candidatura pese a que tenía fijado el día, la hora y hasta el discurso. Se le anticipó Jorge Alarte.

Aquella enésima crisis interna desembocó en el congreso que se celebró un año después „septiembre de 2008„ en el Palacio de Congresos. Fue el primer duelo entre Jorge Alarte y Ximo Puig. Ganó el entonces alcalde de Alaquàs por 20 votos (282 a 262). El segundo pulso llegó en Alicante y ahí se impuso claramente Puig. El por aquellas fechas (30 de marzo al 1 de abril) alcalde de Morella asumió las riendas del partido.