El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, presentó ayer en sociedad su Consell tras unas durísimas negociaciones entre PSPV y Compromís para delimitar las áreas de influencia y los nombres de los titulares. Finalmente se ha cumplido la prerrogativa de la vicepresidenta Mònica Oltra y el Ejecutivo será paritario, con dos independientes de prestigio en dos conselleries estratégicas, que no son las inicialmente previstas. La fiscal y exportavoz del Consejo General del Poder Judicial, Gabriela Bravo, para Justicia y Gobernación, y la ecologista y exdirectiva del Gobierno de Zapatero Elena Cebrián. La polémica entre Bloc e Iniciativa por el nombre del conseller de Educación se salda con una victoria de los críticos con Enric Morera y sitúa al profesor de inglés y miembro de Escola Valenciana Vicent Marzà en el segundo departamento con más presupuesto.

El Consell no estuvo claro hasta las 23 horas del domingo, cuando Compromís cerró sus consellers tras horas de negociaciones y tensión. El profesor de Derecho Constitucional Manuel Alcaraz será conseller de Transparencia y Rafa Climent, titular de Economía. El PSPV lo tuvo cerrado antes, situando a la diputada del PSOE Carmen Montón como consellera de Sanidad y a la diputada del PSPV en las Corts María José Salvador de consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio. El decano de la Facultad de Economía de la Universitat de València, Vicent Soler, ocupará la Conselleria de Hacienda y Modelo Económico.

En este Ejecutivo y según dijo el propio Puig, Oltra tendrá un protagonismo especial como portavoz y titular de Igualdad y Políticas Inclusivas, antes Bienestar Social. Puig reivindicó un Consell «vanguardista en la lucha contra la corrupción», comprometido con las personas y representante de una «alianza con la diversidad». Cinco hombres y cinco mujeres que van desde los 32 años de Marzà a los 65 de Vicent Soler.

En su comparecencia en el Palau y escoltado por Mònica Oltra, que llegó diez minutos antes de la hora acordada para revelar el nombre de los consellers, Puig aseguró que tiene un sentimiento final de «alegría y satisfacción» por este Gobierno progresista, cuyos miembros tomarán posesión hoy y mañana celebrarán el primer pleno del Consell, en el que se harán nombramientos en el segundo escalón y se tomarán las primeras medidas.

El presidente presentó a su equipo como un conjunto de personas «honradas y honestas» que hará frente a la crisis y se dirigirá a «mejorar la calidad de vida de las personas». Se trata, afirmó, de un gobierno «claramente comprometido con un giro social necesario en las políticas de este país».