El alcalde de Ontinyent, el socialista Jorge Rodríguez, tomará posesión mañana como presidente de la Diputación de Valencia. Un cargo al que, según ha sabido este periódico, llegará acompañado por José Manuel Orengo, exalcalde de Gandia y portavoz del grupo socialista durante la pasada legislatura. Orengo no será diputado „no estuvo en las listas del PSPV en Gandia„ pero Rodríguez le ha pedido que se incorpore a su equipo. Según diversas fuentes, será una relación «temporal», para acompañar a Rodríguez desde su gabinete en el aterrizaje en la corporación provincial, una casa que no conoce y que Orengo ha pisado casi a diario los últimos años. Aún no se ha decidido qué puesto ocupará. Orengo, además de ser el valedor de Rodríguez como aspirante a la Presidencia de la corporación, es una persona de la máxima confianza del jefe del Consell, Ximo Puig, lo que garantiza los puentes entre los dos palacios de la plaza Manises y apacigua cualquier suspicacia de confrontación.
Durante las últimas legislaturas, cabe recordar, el PP ha tenido un foco de conflictos con la presidencia de la diputación, convertida por Rus en una estructura de poder paralelo dentro del partido, asumiendo competencias autonómicas y apareciendo como salvavidas de unos alcaldes ahogados por la crisis y la incapacidad financiera de la Generalitat.
Así las cosas, al menos en los primeros meses de la legislatura, Orengo se perfila como el hombre fuerte en el día a día. Sobre todo con un nuevo presidente que mantendrá la Alcaldía de Ontinyent „aunque ha dado poderes a la concejala Rebeca Torró„ y tiene intención de pisar poco el despacho y «salir a los pueblos» con asiduidad, apuntan desde su entorno.
Día de reuniones con Compromís
Rodríguez, además, se enfrente a un arranque de legislatura con algunos obstáculos. Como la cogestión junto a su socio de gobierno Compromís de la empresa pública Imelsa o el traspaso de algunas competencias a la Generalitat, con un Consell que aspira a reducir el poder de las corporaciones provinciales. Una delicada tarea que puede ser un foco de tensión entre ambas administraciones y de la que se ocupará, probablemente, el socialista Antoni Such, como director general de Administración Local, dependiente de Presidencia. Rodríguez está dispuesto a facilitar la coordinación con la Generalitat y evitar las duplicidades, pero presentará resistencia si desde el otro lado de la plaza pretenden minimizar su presidencia.
Durante la jornada de ayer y el día de hoy PSPV y Compromís terminarán de perfilar el reparto de competencias dentro de la nueva corporación. Además, el presidente en funciones de la Diputación de Valencia, Juan José Medina, y Jorge Rodríguez se reunirán para iniciar el proceso de traspaso de poderes entre la corporación saliente y la nueva, con un encuentro entre ambos en el despacho de Presidencia. Mañana martes se celebrará el pleno extraordinario que hará oficial el relevo de Alfonso Rus.
