El conseller de Educación, Vicent Marzà, reclamó ayer en Madrid a su homólogo estatal, el ministro Íñigo Méndez de Vigo, un «sistema de financiación autonómico justo», que en cuanto a enseñanza «se traduce en 288 millones de euros más para el alumnado valenciano cada curso».
El encuentro con el sustituto de Wert se enmarca en las reuniones individuales que ha anunciado el ministro con todos los consejeros autonómicos previa a la Conferencia Sectorial de Educación de este próximo agosto.
Marzà ha insistido ante el ministro que «el fracaso escolar en el sistema educativo valenciano tiene un nombre, financiación autonómica, y un apellido, Lomce», que supone dejar de percibir 288 millones de euros al año para invertir en educación autonómica.
El conseller se ha mostrado muy preocupado por las cifras de fracaso escolar del alumnado valenciano, el segundo más alto de España, con un 37 % de alumnos que no obtienen el graduado escolar. «La aplicación de la Lomce intensifica aún más la emergencia educativa», ha aseverado. «Los efectos de la Lomce „añade Marzà„ son muy negativos para nuestro alumnado y pedimos que se derogue una ley que se aleja mucho de dar un servicio gratuito básico: calidad educativa óptima».
El aumento de las ratios de alumnos por aula, los recortes en profesorado, la falta de recursos pedagógicos, la falta de promoción del plurilingüismo, y la importancia de asegurar el aprendizaje de las lenguas cooficiales son algunos de los elementos que el conseller ha expuesto al ministro. Asimismo, Marzà ha detallado las propuestas de modificación de los decretos que desarrollan la Lomce en la C. Valenciana para el próximo curso y ha explicado a Méndez de Vigo que el Consejo Escolar autonómico el martes «emitió por unanimidad un dictamen favorable» a dichas reformas. «Hemos destacado que queremos tomar estas medidas, para minimizar los efectos negativos de la Ley Wert, pero que sería deseable que para el curso 2016-17 se derogara, pues es necesario que todos los gobiernos construyamos un pacto de consenso educativo», concluye.
