El proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2016 prevé una inversión real en infraestructuras de la Comunitat Valenciana de 176,65 euros por habitante. Esta cifra mejora en 20,14 euros los presupuestos consolidados de 2015, en que la ratio de inversión estatal per cápita en tierras valencianas es de 156,51 euros. Pese al incremento, cada valenciano aún está a 60,5 euros por debajo de la inversión media del conjunto de las autonomías, que el próximo año será de 237,18 euros por habitante.

En términos relativos la valenciana es la tercera autonomía donde más va a crecer la inversión per cápita del Estado al incrementarse un 12,9 %. Sólo mejoran esta variación el País Vasco, con un aumento del 2,5 %, e Illes Balears, con una incremento del 15,2 %. Esta subida contrasta con el retroceso global de la inversión regionalizable de un 1,7 %, pues en el conjunto de las CC AA, esta partida cae en 4 euros por habitante. Los mayores retrocesos se aprecian en Murcia, donde la inversión decae un 22,8 %, y en Castilla y León con un -16 %.

No obstante, pese a perder 111,67 euros por habitante en inversiones, la vieja Castilla se mantiene como la región más beneficiada por el Estado en cuanto a infraestructuras con 587,37 euros per cápita. Tanto esta ratio como la de Galicia, que es la segunda más alta con 499,36 euros por persona, triplican la inversión por valenciano, que a su vez es casi la mitad de la que percibirá un cántabro o un extremeño.

La cifra de 176,65 euros que va recibir el próximo año cada valenciano para infraestructuras, al igual que este 2015, es la sexta más baja de España. No obstante, por detrás de la C. Valenciana se encuentran dos autonomías que compensan el escaso esfuerzo inversor del Estado con un sistema de financiación privilegiado, como es el caso de la comunidad foral de Navarra, o Canarias, con un régimen singular debido a su insularidad.

La situación de la Comunitat en el furgón de cola de la inversión per cápita representa en números redondos 301,2 millones menos para infraestructuras, que es lo que debería percibir si estuviera en la media de 237,2 euros por habitante.

Antes de los comicios de 2011, Francisco Camps introdujo en la reforma de l'Estatut una cláusula „al igual que la que tiene aprobada Andalucía„ que blinda las inversiones del Estado en función de la población, pero el veto del Gobierno del PP la mantiene olvidada en algún cajón del Congreso. Si el Ejecutivo de Rajoy hubiera aprobado dicha cláusula, que se tendría que haber aplicado desde 2012, la C. Valenciana debería haber recibido en estos cinco años 2.037 millones más en inversiones.

La C. Valenciana percibirá también para inversiones otros 56,05 millones de los 425,81 que repartirán en 2016 los fondos de compensación interterritorial. Esto supone 830.000 euros más que en 2015, apenas una subida del 1,5 %. La Comunitat, que suma el 13,2 % de estos fondos, es la segunda autonomía que más ingresa por esta vía tras Andalucía, que con 159,4 millones concentra el 37,% de esta partida destinada a corregir los desequilibrios entre las regiones.