Uno de los objetivos de Compromís y PSPV al asumir Educación era enterrar los Centros de Iniciativa Social (CIS), los colegios a construir por empresas privadas sobre suelo público a cambio de garantizarles el concierto educativo durante 75 años. Esta era la propuesta estrella del anterior Consell del PP ante la falta de liquidez para construir colegios. Sin embargo, al bipartito no le ha hecho falta ni sacar la pala, pues al entrar en conselleria se ha encontrado de cuerpo presente a los dos únicos CIS que logró licitar la exconsellera Mª José Català. Ambos fueron declarados desiertos por la anterior conselleria al considerar «inviables» los proyectos educativos presentados por las adjudicatarias.

De los 10 CIS que pretendía sacar a concurso, la Generalitat sólo fue capaz de licitar dos pese a que aseguraba que había 20 municipios que le ofrecían suelo y hasta 60 empresas interesadas. Lo cierto es que al final sólo dos empresas optaron a cada uno de los dos CIS licitados en Elx y Calp. A cambio del concierto durante 75 años, la adjudicataria debía costear la construcción del centro „unos 8 millones de euros„ y abonar un canon anual (8.497 euros en Calp y 11.467 en Elx) por asentarse sobre suelo público. Los centros a concertar eran de tres líneas educativas de Infantil hasta ESO y , por tanto, con capacidad para más de 1.200 escolares.

Firma implicada en la Púnica

En Calp una de las firmas en liza era Alfedel SLU, sociedad limitada unipersonal del empresario Alfonso Ferrón del Río, imputado en la operación Púnica. La investigación a esta empresa se centra en la concesión de cuatro CIS en Madrid „el Consell importó el modelo de la comunidad madrileña„ en cuya construcción intervino David Marjaliza, socio del exconsejero popular madrileño Francisco Granados. Éste último lleva 9 meses y medio en prisión acusado de ser el presunto cabecilla de la«organización criminal» dedicada al cobro de comisiones ilegales a cambio de la adjudicación de contratos públicos desarticulada en la Púnica.

La conselleria apartó a Alfedel SLU por no acreditar suficiente solvencia económica y porque su objeto social no era el gestionar centros educativos. Tras ello, sólo quedó un único aspirante al CIS de Calp, el grupo educativo valenciano Iale-Elian's de la familia Monzonís Marín, que por primera vez optaba a un centro concertado.

El pasado 18 de junio, a una semana y media del traspaso de poderes, la Mesa de Licitación de la conselleria del PP consideraba «no viable» el proyecto educativo del grupo Iale y declaraba desierto el concurso. Así pues, el conseller Vicent Marzà sólo ha tenido que certificar la defunción de este CIS publicando la resolución heredada.

Desierto desde diciembre

El CIS de Elx, sin embargo, ya estaba más que amortajado cuando Marzà asumió el cargo el 30 de junio. La Mesa de Licitación lo declaró desierto el 1 de diciembre de 2014 al no cumplir la normativa los proyectos educativos presentado por las dos aspirantes, ambas de Madrid. Una de ellas era el Trinity College Group of Spain SL, cuyo propietario es socio del expresidente Aznar, y la otra Educatio Servanda, una fundación educativa de carácter cristiano que en el CIS que le ha adjudicado la Comunidad de Madrid separa por sexos a los escolares en clases diferentes a partir de los 12 años.

Aunque la resolución definitiva por la que el CIS de Elx queda desierto data del 6 de marzo, la anterior conselleria ni se molestó en publicarla en el Diario Oficial, cosa que ha tenido que hacer ahora Marzà.