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Sanidad

"Pensaba que tener la tarjeta no iba ser posible; ahora sé que podré ir a un médico"

La Conselleria de Sanitat Universal entrega 2.200 tarjetas a inmigrantes irregulares en el primer mes de aplicación del nuevo decreto

Flor tiene su nueva tarjeta desde hace unos días. Fernando Bustamante

Takukam Toukam, de 29 años, natural de Bameka (Camerún) puso en riesgo su vida en más de seis ocasiones al subirse dentro de una patera para llegar a España y vivir así el imaginario sueño de la prosperidad occidental. Después de un año en Valencia, alojado en albergues y donde ha podido, y saberse un excluido del sistema sanitario, por fin ayer este joven africano recogió en el mostrador del centro de salud de Salvador Pau de Valencia su primera tarjeta sanitaria provisional que le da derecho a entrar en la consulta del médico con la garantía básica que debe asistir a cualquier ser humano a ser atendido en caso de enfermedad.

Takukam explica que en los primeros meses de estar en Valencia tuvo un problema con un sarpullido que le salió debajo de la barbilla y que no pudo tratarse durante más de tres meses. «No podía hacer nada, porque no me atendían», afirma.

Gracias a la ayuda de Cáritas el camerunés accedió a una dermatóloga que le trató y resolvió el problema. A partir de hoy, con su nuevo documento sanitario en la cartera, sabe que si enferma, será atendido con todos los derechos, sin que le pregunten por su situación legal o sus ingresos.

«Tener esta tarjeta es algo muy bueno, al principio —añade pensativo—, pensaba que no iba a ser posible, pero a partir de ahora sé que si me pongo enfermo o me pasa algo podré tener la atención de un médico».

En un bar próximo a la Asociación de Camerunenses de Valencia trabaja Flor como cocinera. Ella también está contenta y mucho más tranquila desde que hace unos días tiene en su haber su nueva tarjeta sanitaria.

«Es un gran logro, hemos estado luchando desde la Plataforma Intercultural desde el primer día, aquel 20 de febrero de 2013, que fue cuando se decidió sacar de la Seguridad Social a los 78.000 inmigrantes en situación irregular »,declara a Levante-EMV el presidente de la entidad, Eduardo Béjar.

Eduardo y Adolfo, otro responsable de la Plataforma, recuerdan lo que han luchado durante este tiempo para superar esa carrera de obstáculos que en su día supuso la exclusión y la creación del Plan de Protección de la Salud, que puso en marcha el último gobierno del PP, y que pretendía paliar ese gran vacío que finalmente solo se tradujo en 3.500 tarjetas a inmigrantes.

La Conselleria de Sanidad Universal dio a conocer ayer que en el primer mes de aplicación del nuevo decreto ley 3/2015, que regula el acceso universal a la atención sanitaria en la C. Valenciana y que devuelve la tarjeta sanitaria a los ciudadanos en situación irregular, se han entregado ya 2.200 documentos, 492 definitivos y 1.722 con carácter provisional. Un 56 % de los beneficiarios son mujeres. La mitad de los nuevos titulares se encuentra entre los 25 y 40 años.

¿Cómo se han apañado durante estos años para resolver sus problemas de salud? «El inmigrante iba al médico cuando estaba en las últimas y no podía más», explica Eduardo Béjar que añade que algunos tenían que pagar porque no tenían más remedio, como el marido de una marroquí que tuvo que pagar 200 euros para que a su mujer le trataran un embarazo de alto riesgo. «A la gente —añade Eduardo—le daba miedo físico, por si les pasaban facturas al cobro y muchas veces aguantaban los dolores como podían».

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