Arranca el curso y uno de los asuntos que marcará septiembre será la negociación del pacto entre Podemos y Compromís para las generales. Hasta ahora, Podemos ha dejado claro su interés en la ceremonia del cortejo que tuvo lugar antes del verano. Más aún tras las últimas encuestas: Pablo Iglesias necesita aliados para frenar el retroceso demoscópico.
En Compromís, por su parte, sus dos almas se dividen entre el entusiasmo de Mònica Oltra „«Compromís-Podemos sería una hermosa marca electoral»„ y las reticencias de un Bloc muy exigente: programa valenciano, preeminencia de la coalición en el nombre y los candidatos y un grupo propio en el Congreso formado por los diputados valencianos.
Ayer, Podemos volvió a la carga. «Vamos a ser generosos en el programa y a la hora de hablar de un grupo parlamentario posterior», lanzó el líder autonómico, Antonio Montiel, después del Consejo Estatal de ocho horas celebrado en Madrid. «Estoy dispuesto a trabajar en esa línea si Compromís hace un esfuerzo por su parte. Fuimos generosos en l'Acord del Botànic», añadió a Levante-EMV.
¿Y qué se pide a Compromís? Que le ceda el primer puesto en la futura marca electoral, que sea Podemos-Compromís, y no al revés. «Tenemos el mandato de nuestras bases de que así sea, para dar la imagen de coherencia», ya que Podemos será el elemento común en todos los territorios, explica Montiel. «No creo que Compromís lo vea innegociable», vaticina.
El líder de Podemos quiere que las conversaciones comiencen ya, independientemente del ritmo de cada partido en sus procesos internos. «Quiero que vayamos trabajando en el programa y en articular el trabajo del futuro grupo parlamentario, en cómo funcionaría las relaciones con el grupo estatal de Podemos», añade. Al margen de esto, Montiel mantiene la apuesta por incorporar al pacto a otros «colectivos y personalidades» independientes. Y lanza un mensaje al Bloc. «Es necesario que Compromís se convenza de que es no es un acuerdo como aquellos en que participó alguno de sus socios», dijo, apelando al «espíritu de unidad popular» de las mareas y los movimientos de Colau y Carmena.
