La Comunitat Valenciana está decidida a ser solidaria y dar ejemplo en la acogida de los refugiados que huyen de países en conflicto como Siria, Eritrea o Afganistán. La maquinaria solidaria ya está en marcha, pero tanto el Consell como ayuntamientos como el de Valencia esperan conocer cuanto antes la cifra de exiliados que el Gobierno español tiene previsto acoger, según las directrices de la Unión Europea. La vicepresidenta del Consell, Mònica Oltra, asistió ayer con ese objetivo a la reunión de la Conferencia Sectorial de Inmigración y salió «decepcionada». «Estoy estupefacta. He venido aquí a trabajar pero ha sido un encuentro inútil. Las comunidades queremos saber cuántas personas, cuándo y cómo van a venir» señaló Oltra tras criticar la «charla» del Ejecutivo que, según ella, «no ha puesto nada encima de la mesa».

Y es que el Consell —junto a otras comunidades autónomas como la de Andalucía, Cataluña, Aragón y Extremadura— pidió al Gobierno de Mariano Rajoy «la máxima celeridad» para atender a los refugiados que deberá acoger España. Los responsables autonómicos esperaban conocer, al menos, cuál será el criterio para distribuir a estas personas entre las distintas regiones y los fondos europeos con los que contarán. Sin embargo, se marcharon de Madrid sin respuestas y con una evidente indignación. Por ello, le pidieron al Gobierno ser «más concretos» en la próxima ocasión y le exigieron que acepte «sin rebajas» la cuota de refugiados que determine la UE para España.

La vicepresidenta del Consell, Mònica Oltra, no obtuvo la respuesta deseada de la reunión, pero trasladó las peticiones y propuestas del Consell, negro sobre blanco. Y es que para Oltra es una «prioridad» que los refugiados lleguen cuanto antes y en un viaje que les acarree los menores problemas posibles. Por ello, planteó el traslado de las personas que han llegado a las costas de Italia o Grecia «a los puertos de Valencia, Barcelona, Cartagena o Palma». Se trataría, en definitiva, de la «puesta en marcha de un corredor humanitario por el Mediterráneo con el finde trasladar a los refugiados con rapidez».

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, recogió el guante de Oltra y anunció ayer que, si el «corredor humanitario» por mar se llevara a cabo «el ayuntamiento propondrá utilizar el edificio Veles e Vents como centro de distribución». Ribó puntualizó que se trataría de un «gesto simbólico» y recalcó que solo será «un centro de recepción, no de acogida».

La ministra de Empleo, Fátima Báñez, aseguró que «trasladará la propuesta del Gobierno valenciano de crear un corredor humanitario en el Mediterráneo a la reunión del Consejo de Ministros de la Unión Europea de Asuntos de Interior» que se celebrará le próximo 14 de septiembre.

Oltra también solicitó que se «agilice la tramitación de las peticiones de asilo» y se recupere «la partida del fondo de acogida de menores inmigrantes». Igualmente, reclamó corredores humanitarios junto a las zonas de conflicto porque ahora lo considera «lo más urgente», rechazando por el momento intervenciones militares.