La Conselleria de Educación ordenó ayer, apenas 48 horas después de instalarlos, la retirada de los barracones en altura del colegio público de Educación Infantil y Primaria (CEIP) 103 de Valencia. Además aseguró que durante 2016 comenzarán las obras de construcción de esta escuela que lleva desde que se abrió hace 9 cursos integramente en barracones a pesar de estar a tan sólo 300 metros de la Ciudad de la Artes y las Ciencias.

Esta fue la respuesta con la que el secretario autonómico de Educación, Miguel Soler, ha desactivado el plante de los padres del CEIP 103, que en el primer día del curso se negaban a dejar entrar a sus hijos en el colegio si la conselleria no garantizaba la seguridad de la nueva estructura. Soler se presentó en el centro un cuarto de hora antes de que abriera sus puertas, secundado por los responsables de obras de la conselleria y con las certificaciones que los barracones en altura son seguros, pero dispuesto a atender la petición del Ampa que desde hace cuatro meses reclama que las dos aulas que precisa el centro se ubiquen en un solar municipal anexo.

Gran parte de los padres de los más de 380 alumnos del centro no permitieron que sus hijos entraran a las aulas hasta que el presidente del Ampa, Ulisses Calabuig, explicó por megafonía que «ningún niño va a subir a los barracones del primer piso». En parte porque la instalación aún no ha concluido.

Soler, tras insistir que la disposición en altura de los barracones «es totalmente segura», relató que en el caso del 103 «es una solución que nos hemos encontrado ya hecha por la anterior Administración». En concreto, detalla que en marzo la dirección del colegio comunicó conselleria del PP que precisaba dos aulas más para albergar a 30 alumnos ante el aumento de matrícula. El secretario autonómico cuenta que, a pesar de que apilar los barracones «resulta más caro», no se optó por solicitar el terreno municipal «porque la conselleria y el ayuntamiento no se hablaban».

Ante el poco espacio que hay en el patio, en junio poco antes del relevo en la Generalitat, Educación ordenó hacer el primer piso de barracones. Esta resolución, acatada por la dirección del colegio pero no los padres, no se ha ejecutado hasta ahora. Ante la movilización de las familias el conseller de Educación, Vicent Marzà, telefoneó en la noche del miércoles al presidente del Ampa y, tras conocer su propuesta de ocupar el solar municipal ha reabierto dicha vía. «Esta mañana —por ayer— en 15 minutos de conversación con el alcalde de Valencia (Joan Ribó) hemos obtenido su compromiso de cesión inmediata», añadió Soler.

El número 2 de la conselleria, tras reunirse con el Ampa y la dirección del colegio, anunció que la «mejor solución» para todos es retirar los barracones en altura «cuando no haya niños en el colegio» y que, antes de Navidad, «si puede ser antes mejor», se instalará un aulario provisional de Infantil a ras de suelo en la parcela municipal.