La sección segunda de la Audiencia Provincial de Alicante ha mantenido la condena a una menor de 17 años embarazada por ocupar una vivienda deshabitada propiedad de un banco, como autora de un delito de usurpación en grado de tentativa.

La medida impuesta consistirá en realizar una tarea socio-educativa de duración no superior a cinco meses dirigida a la orientación en habilidades de crianza y a mejorar su formación de cara a una futura inserción laboral. El tribunal condena también a la madre de la chica a indemnizar solidariamente a la entidad bancaria con una cantidad de 193,60 euros por los daños y perjuicios causados, en el caso de que la perjudicada reclame.

La Audiencia desestima así el recurso de apelación de la menor contra la sentencia del Juzgado de Menores número 1 de Alicante, que consideró probado que la menor y su pareja sentimental, mayor de edad, en marzo de 2014 forzaron la cerradura de una casa deshabitada para ocuparla y vivir en ella.

La menor estaba embarazada de siete meses y residía con su madre y hermanos en una vivienda de alquiler de deficientes condiciones de habitabilidad debido al gran estado de deterioro, por lo que su situación era de alto grado de precariedad económica y social.