Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Educación

«Condenar al aula a alumnos de 18 años sin darles atención específica será malo»

Sindicatos, padres de alumnos y directores de secundaria no consideran prioritaria la propuesta del PSOE

«Condenar al aula a alumnos de 18 años sin darles atención específica será malo»

La propuesta del PSOE de llevar en su programa electoral la ampliación de la escolarización obligatoria de los 16 a los 18 años y materializar este cambio en dos legislaturas ha sorprendido al sector educativo. Los agentes implicados en la Comunitat Valenciana recelan de la viabilidad de la medida y trasladan un mensaje en el que todos parecen coincidir: La idea es buena si existieran recursos suficientes, pero no es prioritaria y puede resultar incluso contraproducente.

«Inasumible en la actualidad». Ferran Garcia, responsable de política educativa de CCOO-PV, asegura que siempre estarán de acuerdo en «ampliar y universalizar los derechos educativos». Pero no es ningún cheque en blanco. Ni mucho menos. «Si obligatorio significa que va a hacerse una educación suficientemente variada y rica en atención diversa como para que todos los alumnos puedan estar en el sistema educativo hasta los 18 años, nos parece perfecto. Pero si simplemente significa obligarlos a estar en una aula, esto será una mala medida».

También por lo que supondría de deterioro de la convivencia en las aulas, con estudiantes escolarizados a la fuerza y sin ningún interés curricular. El representante de CCOO pone el énfasis en que la actual dotación de recursos, la carga lectiva y las posibilidades del profesorado hacen «inasumible» una medida transformadora de este calado. «Habrían de cambiar muchas cosas y mejorar la atención educativa. Especialmente, adaptando los planes educativos para estos alumnos», advierte. Y pone el acento en la necesidad de «flexibilizar la capacidad de atención para atender toda la casuística».

«No es una prioridad». Desde el Sindicat de Treballadors de l'Ensenyament del País Valencià (Stepv), Marc Candela considera que «no es una prioridad ampliar la educación obligatoria a los 18 años». Lo que reclama el Stepv es «empezar por la base con la gratuidad en la educación infantil» y «aplicar medidas para evitar el abandono escolar». «Si amplías a 18 años la obligatoriedad de la escolarización pero no actúas contra los factores que propician el fracaso escolar, no estás solucionando el problema», avisa. «Empecemos la casa por la base y vayamos solucionando los problemas de compensación de desigualdades y evitando el abandono escolar prematuro», recalca.

En su opinión, «tener condenado al alumnado hasta los 18 años en un centro educativo por obligación, y sin posibilidad de adaptarse ni luchar por que se sienta cómodo, no tiene sentido y complicaría la vida en los centros». Prefieren abordar otras cuestiones.

«Primero, atender toda la FP». Josep Lluís Peris, portavoz de la Associació de Directors d'IES del País Valencià, prefiere conocer al detalle el alcance de la propuesta para emitir un juicio más sopesado. Pero lanza una advertencia. Antes que obligar a todos los menores de 18 años a estar escolarizados, «es más importante dar salida a todos los alumnos que solicitan seguir estudiando en la FP pero se quedan fuera del sistema educativo por la falta de oferta.

El año pasado, en la Comunitat Valenciana se quedaron 10.000 alumnos sin poder estudiar en FP por falta de plazas. Lo prioritario „insiste Peris„ es que no se quede ningún alumno por escolarizar, y actualmente se están quedando por la incapacidad de nivelar de la demanda al de la oferta».

«Potenciar la red pública». Màrius Fullana, directivo de la Confederación de Asociaciones de Padres de Alumnos Gonzalo Anaya subraya que su entidad tampoco ha tenido tiempo de discutir una propuesta que califican de «importante». Pero su postura también se inclina por alejarse de maximalismos. «Primero tienen que solucionarse los actuales problemas del sistema educativo público, porque necesita más medios. La educación obligatoria vigente, hasta los 16 años, es la que se ha de impulsar para que funcione bien. Eso es lo primero. Después ya veremos cómo puede mejorarse el resto», sostiene.

El representante de los padres de alumnos apunta que una medida educativa de ese tipo implicaría la reforma de la ley que marca el acceso al mercado laboral, actualmente fijado en los 16 años. Insiste en que la prioridad debe ser «dar cobertura a todo el alumnado en la red pública educativa».

Compartir el artículo

stats