El pleno de las Corts ha rechazado una proposición no de ley presentada por Podemos en la que pedía declarar a la C. Valenciana opuesta a la aplicación del Acuerdo Transatlántico de Comercio de Inversión (TTIP) e instaba al Consell a solicitar al Ministerio de Economía que suspendiera las negociaciones sobre este tratado y otros acuerdos similares. Podemos y Compromís han votado a favor -incluido el conseller Vicent Marzà-, mientras que PP, PSPV y Ciudadanos lo han hecho en contra. Se trata de la primera división del tripartito en una votación.
El diputado de Podemos Daniel Geffner, que ha sido el encargado de defender esta propuesta, ha señalado que con el TTIP se quiere hacer "un traje a medida para las multinacionales", para lo que "estorban los mecanismos democráticos, de protección social, de medio ambiente y del consumidor". "Es un tratado vampiro", ha denunciado.
En la sesión, se ha aprobado por unanimidad la creación de una comisión de estudio para la reforma del Estatuto de Autonomía, tal y como se acordó este miércoles también con el voto favorable de todos los grupos. La propuesta de este jueves ha surgido a raíz de una proposición no de ley formulada por Ciudadanos (C's) para eliminar el aforamiento de los diputados autonómicos, que ha sido enmendada por el resto de grupos hasta derivar finalmente en un texto idéntico al aprobado el día anterior.
La propuesta de Ciudadanos defendía que las Corts instaran al Consell a iniciar un procedimiento de modificación del Estatuto para eliminar el aforamiento de los diputados regionales. Por su parte, desde Compromís planteaban añadir una disposición transitoria para que las investigaciones y procesos judiciales en curso en el Tribunal Superior de Justicia en casos de aforamiento se mantengan en él independientemente de que la dimisión del diputado se produzca estando "vivo" el procedimiento para no alterar el desarrollo del mismo.
El PSPV, por su parte, planteaba sustituir la propuesta de Ciudadanos por la creación de una comisión de estudio para la modificación, en su caso, del artículo que regula el aforamiento, mientras Podemos pedía incluir en la resolución suprimir también el aforamiento del presidente de la Generalitat y los miembros del Consell.
El PP, por su parte, planteaba una enmienda en la que unía a la eliminación del aforamiento del presidente, consellers y diputados la limitación del mandato a ocho años, un único periodo de sesiones en las Corts con agosto como único mes de vacaciones y dar rango estatutario a la transparencia, el buen gobierno y la participación ciudadana.
"Campeona del mundo en aforamientos"
La portavoz de C's, Carolina Punset, ha defendido su propuesta de eliminar el aforamiento dado que se trata de una figura "más que cuestionable" que se ha extendido "como la pólvora" y que, además, "chirría y choca de forma realidad con el principio de igualdad" ante la justicia. Ha destacado que, además de en el fútbol, España "es campeona del mundo en aforamientos" y gana a países como Alemania o a los países anglosajones "10.000 a cero" en el número de aforados.
Para la diputada, el aforamiento parte de la suposición "errónea e injustificada" de que los tribunales superiores serán "más justos" y es un privilegio en tanto en cuanto los políticos aforados pueden ser juzgados por tribunales "en cuya composición han intervenido de forma directa o indirecta", citando, por ejemplo, la amistad de Fernando de la Rúa y Francisco Camps en el caso Gürtel.
Así, ha considerado que se esconde "un intento de proteger a determinados cargos públicos para que les juzguen tribunales más cercanos, más comprometidos con ellos", un "mecanismo tóxico, perverso y negativo" utilizado también por los políticos como mecanismo dilatorio en los juicios.
"Utilización milagrosa de esta figura"
Desde Compromís, su portavoz, Fran Ferri, ha defendido que esta figura quizás tenía sentido como mecanismo de protección de los nuevos cargos en la Transición pero ya no lo tiene y, además, "los propios políticos la han desvirtuado".
Ha criticado que el PP haya utilizado la eliminación del aforamiento como "moneda de cambio" para introducir otras reformas estatutarias y ha censurado que se ha usado para "garantizar la impunidad de comportamientos totalmente repudiables" y para alterar el curso de los procedimientos. En este punto, ha dicho que "expresidentes de esta Cámara han hecho una utilización milagrosa de esta figura".
La diputada de Podemos Fabiola Meco ha asegurado que el aforamiento "no es más garantista" porque en la propia composición del TSJCV y el Tribunal Supremo interviene el poder político, lo que evidencia la "flaqueza" del sistema en la separación de poderes. Así, se ha preguntado su el mantenimiento de esta figura no va asociado a "la tranquilidad de los imputados por tener un verdadero mando a distancia para activar cuando toca".
"El problema son los ladrones"
Por su parte, el portavoz socialista, Manolo Mata, ha indicado que el problema de fondo no es el aforamiento, sino "los ladrones, la gente que roba, que corrompe" y ha destacado que es una garantía "de nuestros electores, no nuestra" y permite a los diputados, en materia de responsabilidad civil, desarrollar su trabajo político.
"Pensamos en la corrupción porque pensamos en los últimos cuatro años", ha dicho Mata, que ha defendido "limitarlo donde tengamos que hacerlo, pero no con propuestas absolutas", sino buscando "una solución que refuerce la soberanía de la que somos depositarios y ayude a combatir la corrupción".
Desde el PP, Alfredo Castelló ha recordado que la pasada legislatura se creó una comisión para estudiar la reforma del Estatuto con los únicos votos a favor "de los malos, del PP" y los grupos de la oposición en la segunda sesión salieron corriendo. De ella, ha agregado, surgió una ponencia que se llevó al pleno y se aprobó, pero para la reforma eran necesarios dos tercios que el PP no tenía.
Ha recordado que unía la eliminación del aforamiento a otras medidas y ha preguntado a los grupos si quieren "una transición auténtica o solo modificar cuatro cositas" del Estatuto.
