El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, discrepa del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, también respecto del papel que han de desempeñar las diputaciones. El líder federal ha defendido en Toledo la vigencia de las instituciones provinciales porque "vertebran territorios", aunque acto seguido ha apostado por "reformarlas y modernizarlas". Por contra, el jefe del Consell y correligionario suyo, Ximo Puig, se ha mostrado en reiteradas ocasiones favorable a liquidar las diputaciones en un plan escalonado consistente en ir vaciándolas de contenido y transferir sus competencias a Generalitat, ayuntamientos y mancomunidades.

Sin ir más lejos, el presidente Puig proclamó el jueves en las Corts que el "gobierno provincial" no existe, en la medida en que no emana directamente de las urnas, y anunció una inminente reforma de la Ley de Coordinación de las Diputaciones para consolidar la intervención total del Consell en sus competencias y a la hora de disponer del presupuesto que manejan. Como ejemplo de subordinación de las corporaciones provinciales a la Generalitat puso el plan #XarxaLlibres en el que la Administración autonómica, los ayuntamientos y las diputaciones han de aportar los 100 millones para subvencionar los libros de texto en colegios públicos y concertados en la etapa de enseñanza obligatoria.

A juicio del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, las diputaciones son "importantes" en muchos lugares, sobre todo, en aquellos donde hay riesgo de despoblación, porque garantizan "la cohesión social". No obstante, ha apuntado que su apuesta pasa por reformar estas instituciones y que dejen de ser "agencia de recolocación de muchos partidos" y ha citado, en concreto, al PP.