El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha trasladado hoy al jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, ante la propuesta independentista en Cataluña, su pleno respaldo a la unidad de España y al cumplimiento de la legalidad, aunque ha rechazado todo "frentismo" y le ha solicitado acompañar la ley con diálogo.

Puig se ha reunido hoy por vez primera con Rajoy en el Palacio de la Moncloa y en la conferencia de prensa posterior que ha ofrecido ha asegurado tener "una grave preocupación por los problemas de la unidad de España", aunque ha explicado que le preocupa más la unión de los españoles, que debe cimentarse en la igualdad.

Al plantearle si apoya la estrategia de Rajoy ante el desafío soberanista, el presidente valenciano ha dicho que la Generalitat es firme defensora de la ley y del cumplimento de las obligaciones de cada uno y aspira a una convivencia armónica entre los diversos pueblos y comunidades de España.

"Aspiramos a que haya un cumplimiento de la ley, no puede ser de otra manera. No puede plantearse la ruptura de la legalidad porque con ello acaba la legitimidad", ha afirmado Puig antes de considerar que el Estado de derecho debe defenderlo cualquier institución.

Pero a renglón seguido ha considerado que a la ley hay que acompañarla con diálogo permanente y con capacidad de entendimiento y se ha mostrado en contra de cualquier tipo de "frentismo".

A su juicio, la ronda de contactos que ha abierto el presidente del Gobierno con los líderes de otras fuerzas políticas es "adecuada" y le ha invitado a que la amplíe a otros espacios de la sociedad.

Respecto a la propuesta de pacto planteada por Ciudadanos que incluye que no haya acuerdos con partidos que apoyan el independentismo, Puig ha señalado que no hay que exportar a toda España el problema que existe actualmente en Cataluña.

"El monotema no debe acabar 'vampirizando' todos los debates políticos en España", ha precisado.

Puig ha insistido en que su posición es bastante clara ante lo que está ocurriendo en Cataluña y que "no es equidistante" de las posiciones existentes.

Ante la posibilidad de que apoyara una hipotética decisión del Gobierno de aplicar a Cataluña el artículo 155 de la Constitución, que permite la suspensión de una autonomía, ha precisado que la Generalitat valenciana no tiene capacidad alguna de intervenir en esta cuestión.

Pero ha insistido en que su Gobierno estará al lado de la legalidad aunque actuando también para facilitar un espacio de encuentro y diálogo.