La oferta de Formación Profesional en la C. Valenciana en centros docentes públicos suma este curso 42.492 plazas de primero en los ciclos de grado Medio y Superior, de las cuales han quedado vacantes 8.856, una de cada cinco (el 20,8 %). Si se añade la nueva FP Básica que introduce la Ley de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) para los alumnos que naufragan en Educación Secundaria Obligatoria (ESO), los institutos han cubierto 39.362 puestos de los 48.993 que han ofertado, quedando libres 9.631 (19,7%).
El secretario autonómico de Educación, Miguel Soler, señala que las vacantes son «un reflejo del incremento del 20 % de las ratios máximas de alumnos por aula» ordenada por el decreto de recortes en educación que introdujo el Gobierno de Rajoy en 2012.
El aumento generalizado de la capacidad de los grupos a 36 e incluso 42 alumnos hace cuatro curso, independientemente de la demanda o de su distribución geográfica, «distorsiona» según Soler la foto fija de la FP valenciana.
Aún así, entre las 26 familias de Formación Profesional que se ofertan en la Comunitat, hay ciclos «donde la demanda supera con creces la oferta», subraya portavoz de la conselleria.
El reto de legislatura de la Conselleria de Educación es, según Soler, reajustar la oferta pública de enseñanza con el fin de «conseguir realmente que todo el que quiera estudiar FP pueda hacerlo».
Mapa comarcal para el verano
Para ello el departamento del conseller Vicent Marzà ha comenzado a diseñar un mapa comarcal de oferta de FP que tiene previsto presentar en verano de 2016. Una nueva geografía de la FP que Educación elabora reuniéndose con los empresarios de cada zona, como por ejemplo ayer en l’Alcoià, para conocer «cuáles son los sectores productivos en los que hace más falta ajustar la oferta», explica el secretario autonómico.
La gran novedad es que el próximo curso Educación comenzará a abrir institutos públicos por la tarde para ofrecer enseñanzas de FP «a la población adulta en paro, que podrán ser ciclos completos de dos cursos o una oferta parcial de módulos (asignaturas), así como aumentar las convocatorias de la acreditación de la experiencia laboral», detalla Soler.
Esto se hará en colaboración con el Servicio Valenciano de Empleo y Formación (Servef) de la Conselleria de Economía, pues para Soler «no tiene sentido separar la FP de jóvenes y adultos».
Ampliar la red de 12 CIPFP
La nueva oferta se concentrará en los 12 Centros Integrados Públicos de Formación Profesional (CIPFP), institutos públicos que sólo imparten enseñanzas profesionales. Educación planea ampliar a lo largo de la legislatura la red de CIPFP para poder extender la formación de adultos, pero se encuentra con la dificultad de tener que reubicar a los grupos de ESO y Bachillerato.
La alternativa, explica Soler, es convertir algunos institutos de Secundaria en Centros de Oferta Integral, «que aunque mantengan la ESO y el Bachillerato dispongan de un amplio catálogo de FP que les permita, en horario vespertino, ofrecer Formación Profesional para adultos junto con el Servef».
También se introducirá un curso «puente» para acceder desde grado Medio al Superior sin prueba de acceso, algo que no se ha implantado pese a contemplarlo el Decreto estatal de FP de 2011 que elaboró Soler como director general del ramo en el último Gobierno de Zapatero. Al ciclo Superior, que abre la puerta a la Universidad desde la FP, se entra directamente desde Bachillerato.
La demanda copa sanidad, deporte e informática
Con menos de un 5 % de vacantes —porcentaje de difícil ocupación al estar en centros alejados de las zonas más pobladas— sobresalen en grado Medio las familias de Sanidad (2,6 % de vacantes) pese a ser la más ofertada, la de Actividades Físicas y del Deporte (2,8 %) y la de Informática y Comunicaciones (3,8 %). Estas dos son las más demandadas en el Superior, con un 2,2 y un 2,6 % de vacantes.
