Pere Mayor tiene su despacho en el distrito del Botànic, pero se ha quedado fuera de ese acuerdo que posibilitó al valencianismo político entrar por primera vez al Consell. Ahora sostiene que hay una campaña contra él, pero sus adversarios íntimos no han calibrado que el primer líder del Bloc tiene más vidas que un gato.
¿A quién va a votar el 20D?
A Joan Baldoví.
¿Su candidato para la presidencia del Gobierno es Pablo Iglesias?
Pablo Iglesias lo tiene muy difícil, por los números que conozco. Quedando cuarto es difícil ser presidente del Gobierno.
¿El Bloc se rompe?
Espero que no. El Bloc se tiene que aclarar. Es bastante evidente que la dirección ha tomado una dirección que no tenía el apoyo mayoritario, no ha escuchado a la militancia.
El electorado castiga a los partidos divididos.
Ahora hay que entrar en un proceso congresual lo más rápido posible para clarificar la situación interna.
Después de una larga travesía del desierto, el valencianismo político ha alcanzado su máximo poder institucional. ¿Por qué pacta ahora con un partido estatal?
El Bloc está dentro de Compromís, donde hay dos posiciones. Los que buscan un referente estatal y que pretenden que Compromís sólo sea una coalición. Luego estamos, ahí está mayoritariamente el Bloc, los que queremos que Compromís sea una fuerza política valencianista.
La parte de Compromís que solo quiere ser una coalición, o sea Iniciativa, ¿puede vetar la utilización del nombre?
Si eres una pura coalición electoral todo el mundo tiene derecho a no repetirla y no firmarla. Es un estatus que algunos han instrumentalizado en la clave que les ha convenido.
¿Conoce algún valencianista en Podemos?
No.
Un componente ideológico importante de Podemos nace en Valencia, entorno al profesor de Constitucional Roberto Viciano, que no esconde su visión jacobina de España.
Podemos nace con la cobertura de unos medios de comunicación muy concretos y de unos profesores universitarios que pretenden absorber lo que era el 15M. Nace para capitalizar todo ese descontento. En estos momentos Podemos es otra cosa. La democracia de base ha quedado apartada, sólo basta mirar como han hecho las listas.
Ribó de alcalde y Pasqual Mollà de «manifesser» de Compromís, ¿y usted tan tranquilo?
Soy miembro del Consell Nacional del Bloc y haré lo posible para que siga consolidándose el Bloc y Compromís como la fuerza política que necesita este país.
Manda poco en Compromís, ¿será porque nunca ha sido comunista?
No he sido nunca comunista. He sido concejal de Ontinyent, y diputado una legislatura, hace años de eso, pero he estado en la época más dura en la construcción de la Unitat del Poble Valencià y del Bloc Nacionalista Valencià. Pero el pasado político a unos no les supone ninguna mochila, y a otros sí.
¿Contrariado?
Muchas veces esa mochila viene dada por una parte de tus compañeros. El fuego amigo es el peor.
¿Quién lo vetó para ser conseller de Economía, Mònica Oltra o los suyos?
Como lo que valen son los hechos, en la ejecutiva del Bloc la persona que me veta es la secretaria de organización del Bloc, Àgueda Micó.
¿Tuvo la oferta?
Es al contrario. Me piden que me presente y preparo una candidatura a la ejecutiva, donde han gente que se manifiesta a favor y en contra. Cuando se me hace explícito que no despierto el consenso y que no se votará en el Consell Nacional, aparto mi candidatura. No he venido a la política por un cargo.
¿Hubiera aceptado encantando ser conseller de Economía, no?
Si se hubieran dado las condiciones, claro.
¿Qué nota le pone al Consell?
Es un poco pronto. El Consell actual superará en voluntad y honestad a los anteriores. Otra cosa es la gestión, porque hay pocos recursos, por la infrafinanciación y el menosprecio del Estado a la Generalitat. El peso político de los valencianos en el Estado es nulo, incluso de risa.
¿Y a Compromís?
Tiene que pasar de las palabras a los hechos. Algunos todavía piensan que están en la oposición, y deben darse cuenta que ahora gobiernan.
¿Será presidente de la Cámara de Comercio?
No. Lo explica bastante bien el último libro de Umberto Eco, aquello de tirar un pozal de mierda que luego por mucho que quieras limpiar, algo quedará. Nadie, ni ningún representante político, ni ninguna institución me ha ofrecido estar en la Cámara de Comercio. Y mucho menos ser presidente.
Es empresario, podría serlo.
Sí, como podría ser otras muchas cosas, pero no es verdad. Ni yo me lo he planteado, ni nadie me lo ha ofrecido.
Por cierto, ¿a qué se dedican sus empresas?
Tengo una empresa relacionada con la biotecnología, y otra sociedad, donde también soy minoritario, relacionada en el mundo de la informática. Una está en el extranjero, con socios de aquí, Extremadura y de Madrid. La otra con socios valencianos.
Actividades que le permitirían dedicarse a alguna actividad pública.
Claro, pero tendría que dejar la actividad privada.
¿Baraja un cambio del gobierno valenciano tras las elecciones generales?
En política todo puede pasar.
¿Muchas decepciones personales?
Mejor un poco de sorpresa.
¿Por ejemplo?
Todavía estoy sorprendido, después del tiempo pasado, de la cantidad de puestos de confianza y cargos con carnet del PP que siguen en su sitio.
Los responsables son los actuales gobernantes.
Evidentemente. Algún ayuntamiento importante y en muchas conselleries se siguen manteniendo.
¿Más culpa de Compromís o del PSPV?
El partido socialista también mantiene algunos cargos del PP. Eso pasa porque no se tienen claros los criterios políticos que se quieren implantar, porque se adopta una posición más cómoda, o algunos incluso piensan que es más demócrata. Creo que es al contrario, porque la gente del PP se acaba riendo de esa actitud. En cualquier caso lo interpreto como una actitud de debilidad.
¿Está de acuerdo en prohibir los contratos púbicos a empresarios imputados por corrupción?
Totalmente de acuerdo, los imputados y, sobre todo, los que tienen sentencia.
¿El proceso independentista en Cataluña complica las relaciones entre Valencia y Barcelona?
Por una parte las complica y por otras las rebusca.
Me lo explica.
Las complica porque causa un problema gravísimo de fluidez en las organizaciones de ámbito estatal. Y las reubica porque los valencianos vivimos una situación de maltrato fiscal y económico que está repercutiendo en nuestros servicios educativos, sanitarios y sociales.
¿Hay empresas valencianas que recelan de las relaciones comerciales con Cataluña?
En el mundo de la empresa eso tendrá poco peso. La realidad se acabará imponiendo y la empresa que tenga intereses seguirá con sus relaciones.
¿Le ha sorprendido el «procés»?
No creía que Convergència y Artur Mas jugarán la carta hasta el final, aunque también ha habido una mala interpretación del gobierno español de lo que pasaba en Cataluña.
¿Hay salida?
Pasa por un referéndum vinculante, como en Quebec y Escocia.
¿Un Bloc con líder hubiera pactado con Podemos?
La dirección del Bloc?
Le pregunto por el liderazgo.
El liderazgo actual, al menos eso dicen, lo practican de una manera coral. El liderazgo es responsable de como se han producido los hechos.
¿Y tras las elecciones?
Habrá un buen resultado, otra cosa es como se distribuirá y quién tendrá la responsabilidad.
¿Hay espacio para un partido valencianista transversal?
Ha crecido y lo representa la suma del Bloc y el resto de Gent de Compromís. Cada día tendrá más peso, si se sabe hacer.
¿Y para otro partido nuevo valencianista?
Hay algunos grupos minoritarios que lo intentan, pero el espacio valencianista es Compromís. Otra cosa es si una parte de Compromís intenta enrolarse en un espacio estatal, entonces el actual Compromís tendría que hacer otro camino.
¿Si Mònica Oltra decide ser la referente de Podemos en Valencia se rompe Compromís?
Sería una decisión respetable.
