Los municipios de la provincia de Castelló han optado por diferentes vías para poner en marcha el plan de gratuidad de libros de texto de la Generalitat, en función de la capacidad de los ayuntamientos y de la población escolar. Así, el mayor despliegue logístico se habilitará en la ciudad de Castelló, donde el consistorio destinará unos 60 empleados a la gestión de las 20.500 solicitudes de ayuda previstas.
Las familias tendrán que presentar la documentación, entre el 1 y el 14 de diciembre, en el vestíbulo del Patronato Municipal de Deportes, donde se ha creado un registro específico de Xarxa Llibres para no colapsar el registro general del ayuntamiento. Los 55 centros educativos de la ciudad tienen una fecha concreta asignada, en función del distrito al que pertenecen, para que la presentación de solicitudes se efectúe de manera escalonada (se esperan unas 2.500 al día).
Por otra parte, los sábados 5 y 12 y el lunes 14 serán días de libre disposición, reservados para aquellas familias que no puedan presentar la solicitud en la fecha correspondiente a su colegio o instituto. Los horarios de atención serán de 8.00 a 21.00 horas ininterrumpidamente de lunes a viernes y de 8.00 a 14.00 horas los sábados.
Mientras, en Vila-real, las ampas son las que que tendrán que recoger las solicitudes para luego remitirlas al ayuntamiento. De esta manera, se centraliza la gestión en los propios centros educativos, donde se atenderá a las familias entre el 9 y el 22 de diciembre. Para aquellas que no tengan ordenador o acceso a internet, o encuentren dificultades a la hora de rellenar la solicitud telemática, el consistorio habilitará la sala de ordenadores de la Biblioteca Universitària del Coneixement con personal de apoyo.
Otros municipios, con menor población es colar, han establecido también un dispositivo extraordinario. Es el caso de Benicàssim, donde se ha anunciado un refuerzo del Servicio de Información Ciudadana municipal que recogerá las solicitudes entre el 1 y el 19 de diciembre, de 8.00 a 21.00 horas en días laborables y de 9.00 a 13.00 horas los sábados. La puesta en marcha de Xarxa Llibres no ha estado exenta de críticas, donde ampas y ayuntamientos han coincidido en señalar que el proyecto se ha lanzado de manera «precipitada». «Más dialogo y más tiempo» es lo que le habría gustado al Ayuntamiento de Castelló, que se ha visto obligado a habilitar un despliegue logístico sin precedentes.
