La comisión encargada de establecer los criterios de la creación y el funcionamiento del banco de libros que surgirá a raíz de la Xarxa Llibres, aclaró ayer que los libros de algunas asignaturas como Educación Plástica y Visual y de primero y segundo de Primaria se podrán entregar cumplimentados y escritos sin que esto no suponga ninguna limitación en la recepción de la ayuda que contempla el plan.

Así se decidió ayer en la tercera reunión que la comisión -formada por tres confederaciones de Ampa, dos directores de centros de Primaria, dos de Secundaria, y personal de la conselleria de Educación- mantuvo para seguir concretando los criterios que las familias deben cumplir para cobrar el importe íntegro de la segunda parte de las ayudas que el plan otorga, así como para poder obtener los libros de manera gratuita el curso siguiente.

Otra novedad es que Educación incluye criterios de proporcionalidad. Si un alumno entrega la totalidad de los libros en buen estado, recibirá el 100 % de la segunda parte de las ayudas, es decir, hasta 100 euros por alumno, y la totalidad de los libros para el nuevo curso. Si solo se entregan la mitad de los libros, las ayudas se reducirán en la misma proporción.

Los criterios de la conselleria

El secretario autonómico de Educación e Investigación, Miguel Soler, se reunió ayer por la tarde con la concejala del Ayuntamiento de Valencia, Maria Oliver, para hablar sobre el desarrollo del programa de gratuidad de libros de texto.

Soler y Oliver coincidieron en afirmar que la orden de la Generalitat que regula las ayudas y las bases del consistorio no son contradictorias.

De hecho, afirmaron, se inscribe en el mismo objetivo de ayudar a las familias para la adquisición de libros de texto. Explicaron que las bases reguladoras del procedimiento dictado por el Ayuntamiento de Valencia establecen que la acreditación del buen estado de los libros para poder cobrar la ayuda y recibir libros se realiza conforme establezca la Conselleria.

El secretario autonómico y la concejala también recalcaron que el banco de libros que se creará al finalizar el curso es una forma sostenible de ayudar que, además, promueve los valores de responsabilidad, participación y solidaridad.