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Malestar entre los fiuncionarios

Medio Ambiente promociona a una funcionaria procesada en Gürtel

La Dirección de Prevención de Incendios (Compromís) confía a dedo a la técnica una jefatura de servicio

Medio Ambiente promociona a una funcionaria procesada en Gürtel

La Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente ha promocionado como jefa de servicio a una de las funcionarias de la Generalitat que sentará en el banquillo de la Audiencia Nacional por la pieza de Gürtel sobre los contratos menores. El nombramiento, que se ha llevado de forma discreta, ha generado malestar entre los funcionarios del departamento que dirige Elena Cebrián. En concreto, la trabajadora ascendida es Patricia Callaghan, que se enfrenta a una condena de tres años de prisión y 15 de inhabilitación p0r el contrato en 2004 con Orange Market para la elaboración de un vídeo sobre el uso del contenedor amarillo en Vaersa, un trabajo que nunca llegó a hacerse, a pesar de que la firma que dirigía El Bigotes cobró parte del mismo.

A Callaghan, que entonces era jefa de sección de Calidad Ambiental, se le acusa de ser el contacto de la conselleria con la firma de la trama Gürtel. La funcionaria, que en un primer momento declaró como testigo, aunque acabó siendo imputada, basó su defensa en que en su puesto no tenía capacidad de contratar y señaló al equipo de Territorio entonces liderado por el exconseller Rafael Blasco. Con el escándalo judicial ya estallado, Callaghan continuó en Territorio, pero fue trasladada a los servicios territoriales.

Sin embargo, con el cambio de Gobierno, lejos de quedar en un segundo plano, Callaghan ha sido rescatada y trasladada mediante una comisión de servicios al área de Conciliación de Usos y Sensibilización para la Prevención de Incendios. Esta jefatura de servicio depende de la Dirección General de Prevención de Incendios, en manos de Compromís, en virtud del reparto de cargos del bipartito para el mestizaje de las conselleries. Al frente de la Dirección General de Prevención de Incendios se encuentra Delia Álvarez.

El traslado de Callaghan, una funcionaria con gran experiencia en el área de Medio Ambiente (con el Consell del PP llegó a ser jefa de servicio de Autorización Integral Ambiental) , no se ha producido mediante concurso. De hecho, ninguno de los ascensos de funcionarios decididos por el nuevo Consell se están haciendo mediante este procedimiento. La vía es la comisión de servicios, una petición que necesita el visto bueno de la dirección general de turno en la que está asignada la jefatura de servicio y del subsecretario.

Fuentes oficiales de la Conselleria de Agricultura aseguraron que el nombramiento no se ha producido formalmente, si bien no negaron las nuevas responsabilidades de la funcionaria. De hecho, la técnica aparece en la guía Prop de la Generalitat formalmente como responsable del servicio de Conciliación de Usos para la Prevención de Incendios.

Desde la conselleria se afirmó también que en realidad el puesto no está creado en alusión a que el Consell todavía no ha aprobado la nueva relación de puestos de trabajo de la Generalitat. Sin embargo, el Reglamento Orgánico y Funcional de la Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente crea específicamente esta unidad y le asigna una serie de competencias, entre ellas, «la gestión de políticas de información y concienciación ciudadana en materia de prevención de incendios.

Competencias en fondos

Pero, además, la funcionaria, a la que se le juzga por el pago a Gürtel de la campaña de concienciación sobre el contenedor amarillo, tiene competencias en la gestión de las líneas de subvención y los convenios de colaboración con las asociaciones, así como las funciones orientadas a la formación y sensibilización ciudadana de los distintos sectores y campañas institucionales de educación ambiental y cursos de formación.

Las fuentes oficiales añadieron que Callaghan tiene consolidado el nivel de su anterior jefatura de servicio y que, aunque insistieron que el nombramiento no está formalizado, la intención de la conselleria es asignarle un puesto «acorde a su nivel». «Mientras que no esté inhabilitada sigue siendo una técnica útil y competente», añadieron.

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