El conseller de Educación, Vicent Marzà, presentó ayer el programa de becas universitarias de la Generalitat para el próximo curso 2016-17 que nace con el doble objetivo de «bajar las tasas a aquellos que realmente lo necesitan» y que ningún estudiante no pueda acceder o «se quede fuera de la universidad por razones económicas».

Una meta que se espera alcanzar con una inversión de 23 millones de euros, 6,5 más que en 2015 „un aumento que roza el 40 %„, de los cuales 4,8 millones se destinarán a eximir del pago de matrícula a los alumnos con menos ingresos.

Una sexta parte del incremento de las ayudas de la Generalitat, más de un millón de euros, se obtendrá al excluir al alumnado de las cuatro universidades privadas de la Comunitat de las becas del Consell. El próximo curso sólo podrán acceder a las ayudas los alumnos del grado de Veterinaria, al no ofertarse dicha titulación en el Sistema Universitario Público Valenciano (Supv).

En la última convocatoria resuelta, la del curso 2014-15, un total 3.121 alumnos de grado de centros privados „dos de cada tres de ellos de la Universidad Católica de Valencia„ recibieron ayudas de la Generalitat en forma de: 153 becas de exención de tasas que cubren el precio público del grado, 28 ayudas Erasmus y 2.940 becas complementarias a las del Ministerio de Educación para cubrir el incremento del tramo autonómico de las tasas universitarias públicas, que es el tercero más caro de España. El ocho por ciento de los becarios de la Generalitat va a la privada.

«Ayudar a los que lo necesitan»

El secretario autonómico de Educación, el socialista Miguel Soler, tras subrayar que se trata de «enseñanza universitaria», y por tanto de una etapa no obligatoria, justificó la decisión del Consell de dejar fuera de sus becas a los alumnos de la privada. «Un alumno de una universidad privada lo es por dos motivos: o porque lo prefiere la familia o porque no ha alcanzado la nota de corte necesaria, de manera que se ha optado por ayudar a los que más lo necesitan», apuntó.

En la misma linea, explicó que en el caso de Medicina, que marca la nota de corte más alta con 12,6, «le estamos dando 1.300 euros en beca de exención de tasas a un alumno que puede pagar unos 8.000 euros de matricula en la privada, mientras que otros con igual o mejor nota se quedan sin estudiar dicho grado porque no pueden costear un centro privado».

En este sentido, Soler, ha detallado que en los últimos cursos, las universidad pública valenciana ha perdido 7.000 alumnos mientras las privada han ganado 41. Tras esta idea de «dar más» a aquellos con menos recursos, recalcó la directora general de Universidades, Josefina Bueno, está «aumentar las personas que acceden a la universidad».

Así, la medida estrella del nuevo programa será, según Bueno, «la primera beca salario de España» que incluye una paga mensual de hasta 600 euros (55,2o € menos que el salario mínimo) «para que puedan estudiar los que no tienen suficiente para pagarse el día a día» dijo Marzà. Se prevé que beneficie a un millar de alumnos de nuevo ingreso. Como en el resto el Consell exigirá una nota de 5 y no de 5,5 como el ministerio. El umbral de renta no debe superar los 18.000 euros anuales para una familia de cuatro miembros.

Introducir perspectiva de género

Otra novedad es la inclusión de la perspectiva de género en las becas para paliar la feminización o masculinización de los grados. Así, en las carreras donde más del 90 % del alumnado sea de un único sexo „como Educación Infantil, donde hay una masiva presencia de mujeres o, al revés en algunas ingenierías„ si dos alumnos empatan, obtendrá la ayuda el del sexo menos representado.