El pulso interno está echado en el seno de la Real Acadèmia de Cultura Valenciana (RACV) de cara a un posible proceso de consenso lingüístico con la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL), la entidad normativa del valenciano según el Estatut d´Autonomia.

La Secció de Llengua i Lliteratura Valencianes de la RACV se reunió ayer de forma extraordinaria dos días después de que el decano de la institución, Federico Martínez Roda, afirmara en una entrevista con Levante-EMV que el próximo Diccionari de la AVL «es el de todos los valencianos». Con ello abre la puerta a una definitiva pax lingüística que apague los últimos rescoldos de la Batalla de València.

El encuentro, al que asistió el decano de la academia por la crisis que han desatado sus palabras, terminó con un comunicado pactado por Martínez Roda y la sección que dirige el académico Voro López. El escrito, enviado a las entidades culturales a última hora y al que ha tenido acceso este periódico, reivindica la vigencia de la normativa de la RACV y no habla en ningún momento de la AVL. Ni para plantear consensos ni para alejarse de ella.

«La Secció de Llengua recuerda que, para la normativización de la lengua valenciana, están plenamente vigentes su ortografía, gramática, diccionarios y demás criterios filológicos», establece el breve comunicado en el segundo de sus tres puntos. En los otros dos, la RACV anuncia que el próximo 3 de marzo, jornada en que celebra el Dia de la Llengua i Cultura Valencianes, presentará en público la segunda edición de su Nova Gramàtica de la Llengua Valenciana. También recuerda, de forma aséptica, que el objeto de la entidad es «la investigación, conocimiento, fomento y promoción de la cultura del antiguo Regne de València „en estos momentos Comunitat Valenciana„, así como la defensa de los valores y las señas de identidad del pueblo valenciano».

Aunque los ánimos estaban caldeados antes de la cita, en ningún momento de la reunión se llegó a pedir la dimisión del decano. La solución pactada fue consensuar un comunicado corto „que en un principio iba a ser más extenso y de tono más contundente„ y sólo enviarlo a las entidades culturales afines al valencianismo secesionista y no remitirlo a los medios de comunicación.

No hay rectificación ni matiz a las declaraciones realizadas por el decano a Levante-EMV, saludadas al día siguiente por el presidente de la AVL como un paso «valiente» que puede ser «el inicio de algo grande», y valoradas por el conseller de Cultura como «un gran paso».

Según fuentes de la RACV, un sector de la entidad considera adecuado acercar posturas con la AVL. «Estamos por arreglarlo y por el consenso», admiten. Pero creen que ahora no es el momento. «Cuando a una persona la tienes atada de pies y manos, a pan y agua y apuntándola con una pistola, no se le puede decir ´vamos a consensuar´. En esta posición de desigualdad „sin ayudas institucionales y sufriendo todo tipo de rechazo y marginación de parte de las instituciones„ no estamos en posición de pactar y consensuar. Hay un desequilibrio enorme», añaden las mismas fuentes. Tal vez sea cuestión de tiempo. O quizá las presiones hagan recular a Martínez Roda. El proceso de pacificación lingüística sigue abierto.