La Diputación de Valencia creará una comisión de investigación para depurar responsabilidades en el caso Imelsa, auditará la gestión de la institución en la empresa pública Impulso Económico Local (Imelsa) y se personará en la causa que se instruye en los juzgados como acusación particular.

Así lo ha anunciado el presidente de la entidad provincial, Jorge Rodríguez, en una rueda de prensa en la que ha anunciado, junto a portavoces del PSPV-PSOE, Compromís, València en Comú y Esquerra Unida, que el objetivo es "saber qué ha pasado, pedir responsabilidades políticas y lograr la devolución del dinero" .

En la comisión, que empezará a trabajar una vez se levante el secreto del sumario que se instruye en el Juzgado de Instrucción 18 de Valencia sobre adjudicaciones fraudulentas a cambio de comisiones ilegales en varias administraciones, está previsto que comparezca el expresidente de la diputación Alfonso Rus, aunque el listado de comparecientes no está cerrado aún.

El PP y Ciudadanos han anunciado que apoyan que se investiguen los casos de corrupción, pero han lamentado el "circo mediático" que el equipo de gobierno de la Diputación de Valencia "está realizando" con este asunto.

El presidente de la institución ha afirmado que tanto la comisión como la auditoría y la personación en el "caso Imelsa" se integran dentro del "striptease integral" al que quieren someter a la Diputación de Valencia para mostrar la gestión de los últimos años e investigar todo tipo de responsabilidades.

Rodríguez ha dicho que el empeño del equipo de gobierno es no solo que se conozca lo que ha ocurrido y que haya colaboración con la justicia, sino también "tomar las acciones necesarias para conseguir que el dinero defraudado vuelva al lugar del que nunca deberían haber salido y sirva a los ciudadanos".

Para ello, ha anunciado la creación de una comisión de investigación que abarque a la Diputación y todos sus organismos autónomos, y que estará presidida por el diputado de Transparencia, Roberto Jaramillo (de València en Comú), quien ha asegurado que se llegará "a los últimos extremos"