El ministro Montoro y el presidente Puig se mostraron ayer de acuerdo en que la interinidad en la que se encuentra el Gobierno de España no puede impedir que arranque ya el proceso de reforma del modelo de financiación.

El titular de Hacienda en funciones se comprometió a iniciar los trabajos y a impulsar la reunión de la comisión de Expertos, con representantes de todas las autonomías para que a finales de año pueda iniciarse ya el camino de la reforma, aunque corresponderá al futuro gobierno la aprobación del nuevo modelo.

Montoro reconoció los problemas que el actual sistema causa a la Comunitat Valenciana y se mostró favorable a pedir la opinión de independientes. «La idea es crear un comité de expertos», señaló. «Buscamos la oportunidad política para crearlo», reiteró. Todos los informes elaborados hasta el momento, más de una decena, ponen de manifiesto que el problema es exclusivamente de ingresos ya que el gasto de la Comunitat Valenciana es inferior a la media. Puig consideró imprescindible poner en marcha la reforma como ya planteó al propio Montoro el pasado mes de noviembre ya que sostiene que en ello va la propia viabilidad de la institución que preside, que acumula una deuda astronómica de más de 42.000 millones de euros. Puig, según recogió la agencia Efe consideró «positivo» el encuentro con Montoro, pese a las discrepancias en algunos asuntos. Defendió que la Comunitat Valenciana no es «malgastadora» pese a las cifras de déficit del año pasado, que cerró en el 2,5% cuando debió hacerlo en el 0,7%, e insistió en el caballo de batalla de la Generalitat: mejor financiación, porque gasta menos que otras comunidades, pero acumula deuda y déficit.

El responsable de Hacienda no concretó cantidad alguna y recordó que la Generalitat se ahorrará este año 631 millones de euros por intereses de deudas y cobrará 952 millones de la liquidación del sistema de financiación de 2014, favorable a las CCAA.