Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

«Mamá, no sabes lo que significa esto para mí. Estoy muy feliz»

Dylan da un paso de gigante porque un cambio de sexo en el registro implica dejar de sentirse «un niño raro»

A pesar de su corta edad, Dylan ha pasado mucho. Ahora, sin embargo, ha dado un paso de gigante en su proceso de «liberación», ya que para este menor, contar con documentos oficiales que reconozcan lo que él es —un niño y no una niña—, implica dejar de sentirse «un niño raro».

«Mi hijo no sabía lo que le pasaba. Nosotros veíamos a nuestra hija un poco 'chicote', un poco 'bruta', pero no se trataba de eso. Dylan estaba sufriendo mucho porque no comprendía nada. Cuando era muy pequeño nos dijo que le llamáramos con nombre de niño pero no lo tomábamos en serio. Conforme se fue haciendo mayor y veíamos el comportamiento, el sufrimiento que tenía... nos fuimos dando cuenta de lo que ocurría. Aún así, el primer diagnóstico ya supuso un antes y un después. Mi hijo ya sabía lo que le pasaba y empezó a aceptarse a sí mismo. Por eso ve todo el proceso, todo lo que ya ha pasado, como una 'liberación'», explica Eva Salvador, su madre, una mujer que lo ha llevado a las consultas que ha hecho falta y que ha movido cielo y tierra para mejorar su bienestar.

Hoy, Dylan quiere ser visible. Quiere ser ejemplo y ayudar a otras personas. Sabe bien lo que se siente cuando uno no se acepta a sí mismo, cuando siente que es raro, diferente. «Con todo lo que ha pasado ha madurado muy rápido», reconoce su madre. Dylan le dijo: «mamá, no sabes lo que significa para mí. Estoy muy feliz».

Compartir el artículo

stats