Los órganos de gobierno de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) y de la Real Acadèmia de Cultura Valenciana (RACV) votarán por separado el próximo lunes 30 de mayo, a las 11.30 horas, una declaración conjunta que servirá como punto de inicio a las negociaciones que pretenden desembocar en la paz lingüística en torno al valenciano. Así lo comunicó anoche el decano de la RACV y principal impulsor de este proceso, Federico Martínez Roda, a la junta directiva de su centenaria academia y a su Secció de Llengua.

El documento presentado anuncia la creación de dos grupos de trabajo para avanzar en el diálogo. Es un texto bastante aséptico, si bien presenta guiños a la órbita secesionista al recoger la denominación «llengua valenciana» y una apuesta por las «formas autóctonas». Sin embargo, los primeros problemas ya han surgido en el seno de la Real Acadèmia.

El filólogo y director de la Secció de Llengua de la RACV, Voro López, anunció anoche a este periódico que se opone a la propuesta de declaración presentada ayer por Martínez Roda. Además, el hombre que coordinó el Diccionari General de la Llengua Valenciana „base actual del modelo lingüístico secesionista que propugna la RACV„ afirma que va a «hacer campaña» por el «no» en el seno de la Real Acadèmia.

El principal motivo de esta oposición, según explica López, es que la declaración conjunta que será sometida a votación «se puede interpretar como un reconocimiento a la autoridad normativa de la AVL sobre el valenciano». Se refiere a un pasaje de la declaración que se limita a describir el actual marco jurídico. El Estatut d'Autonomia dicta que «l'Acadèmia Valenciana de la Llengua es la institución normativa del idioma valenciano» y el modelo que fije «será de aplicación obligatoria en todas las administraciones públicas de la Comunitat Valenciana».

«Eso se puede interpretar mal», considera Voro López, quien ha convocado a una reunión para el próximo martes a todos los miembros de la Secció de Llengua de la RACV. «Expondré mi postura. Y en el caso de que no respalden mi negativa, yo dimitiría», precisa Voro López, un hombre respetado en el seno de la institución.

Su fuerza será más simbólica que efectiva. La Secció de Llengua sólo tiene a cuatro representantes en la junta general de la RACV, compuesta actualmente por 37 miembros (hay tres vacantes). Sólo con que exista mayoría relativa „la mitad más uno de los presentes„, Martínez Roda podrá sacar adelante la declaración. Él confía, por su parte, en que Ramon Ferrer también consiga su objetivo y que el seno de la AVL respalde la declaración conjunta para iniciar las conversaciones, que nadie prevé fáciles ni exentas de obstáculos.

Lo Rat Penat critica al decano

En un nuevo comunicado sobre esta cuestión, Lo Rat Penat ha asegurado que «ni en este momento ni en ningún otro ha mantenido contactos con la AVL o con cualquier otra institución referentes a la naturaleza y singularidad de la Llengua Valenciana». Asimismo, la entidad cívica asegura que las manifestaciones del decano de la RACV «no representan en absoluto la posición de Lo Rat Penat». También afirma que «el señor Martínez Roda no es ninguna autoridad en el campo de la lingüística. Si alguien ha de fijar los criterios científicos de la RACV en esta materia, entendemos que no puede ser nadie más que los miembros de la Secció de Llengua de la institución que él preside, por ser los únicos técnicamente capacitados para hacerlo».