El coordinador de la campaña electoral del PSPV-PSOE, Alfred Boix, está convencido de que el "pacto a la valenciana funciona y es el mejor ejemplo político" de un acuerdo en clave progresista, aunque el "problema" es cuando se intenta exportarlo y "lo han de hacer madrileños".

En una entrevista con la Agencia EFE, Boix (Gandia, 1967) advierte de que "el cambio es echar a Rajoy, no superar en votos al PSOE, y eso pasa por un nuevo esfuerzo para no volver a fracasar y conformar una mayoría".

Pese a reconocer la incertidumbre a la que se enfrentan todos los partidos tras las recientes investiduras fallidas, el secretario de Organización del PSPV-PSOE confía en que la participación en los comicios del 26 de junio no baje más de "dos o tres puntos".

Con un presupuesto que se reduce en más de un 50 % respecto a la campaña electoral de diciembre pasado, el PSPV prevé una campaña diferente, más próxima al ciudadano y con mítines vespertinos para evitar las horas de más calor.

"Los grandes mítines no sirven de mucho", asume Boix, quien explica que no será posible organizar actos en la plaza de toros o en el pabellón de la Fuente de San Luis de Valencia por la celebración de conciertos y eventos deportivos, aunque no se descarta este formato en otra ubicación más reducida.

"Quizá haya demasiada liturgia en los actos habituales de campaña, los mítines, los carteles, el coche dando vueltas con la música... muchas cosas se hacen porque las hacen los demás", admite.

"Dicen que segundas partes nunca fueron buenas, veremos", afirma en relación a la presencia de los mismos cabezas de lista en todos los partidos.

"La percepción de fracaso no creo que sea solo del PSOE, será de todos", sentencia Boix, quien no imagina un escenario con los socialistas por detrás de la coalición liderada por Podemos.

"El PP no va a tener mayoría absoluta, y a partir de ahí habrá posibilidades de cambiar el Gobierno, pero para eso todos los actores han de ceder en algo. Nosotros lo intentamos y algunos no quisieron, se perdió la oportunidad. Esta vez habrá que hacer un ejercicio de responsabilidad mayor", añade.

A su juicio, "el PP agitará la bandera del miedo al radicalismo y podrá tener su público, pero creo que no engaña más".

"Creo que el votante del PP, que merece todo mi respeto, está avergonzado al ver a referentes de su partido en prisión, esposados o procesados. Quizá esa vergüenza debería provocar cierto abandono, porque la gente no es tonta, se da cuenta de lo que pasa", asegura.

Para Boix, el denominado "pacto a la valenciana" entre PSPV, Compromís y Podemos "es el mejor ejemplo" de un acuerdo en clave progresista, aunque "quizá no se ha entendido desde el PSOE y las plataformas nacionales de otros partidos".

El pacto a la valenciana "sale bien porque lo han hecho valencianos, el problema es cuando lo exportas y lo han de hacer madrileños... Pero lo que es bueno para los valencianos, es bueno para los españoles", sentencia.

Para Boix, tras las últimas elecciones autonómicas y municipales el sentimiento de "miedo" por la situación económica se ha "relajado en la Comunitat, porque se ha visto que, dentro de un escenario de falta de recursos, se puede dar prioridad a ciertas políticas, que hay voluntad de no mentir y no robar. El nivel de tensión social ha bajado".

Por eso, advierte, el PSPV volverá a reivindicar la posibilidad de acuerdo con otras fuerzas, la "entesa" con Compromís y Podemos al Senado a la que recientemente Pedro Sánchez cerró la puerta.

"Eso se da por cerrado en este periodo, Ximo Puig ya dijo que el PSPV no iba a ser rebelde. Hemos defendido con toda la pasión y argumentos posibles lo que creíamos positivo para la Comunitat, pero muchas veces el argumento más sencillo no sirve para convencer", agrega Boix.

"Estoy convencido de mis ideas y, si estoy en el cargo, las volveré a plantear cuando se abra la veda, quizá en las próximas candidaturas. Espero que no, pero a este ritmo es posible que haya nuevas elecciones", añade.