Los cinco grupos con representación en las Corts han aprobado por unanimidad una proposición no de ley que insta al Consell a prohibir la instalación y actuación de circos con animales salvajes en la Comunitat Valenciana.

El documento estima que es imposible que los animales puedan satisfacer adecuadamente sus necesidades fisiológicas, mentales y sociales en las condiciones a las que les obliga la actividad del circo ambulante.

Las Corts también instan al Consell a iniciar el diálogo con los responsables de los circos para estipular cláusulas y plazos para la finalización del uso de animales salvajes en esta actividad y su conveniente reubicación.

En España actúan 42 circos bajo 51 nombres comerciales diferentes. Pero no existe un registro público, lo que conlleva, según los grupos parlamentarios, una situación de alegalidad en determinados casos y una falta de control respecto a sus instalaciones y las condiciones de vida de los animales, que se traducen en numerosas irregularidades.

Además, la tendencia creciente en la mayoría de grandes ciudades del mundo es hacia la prohibición total del uso de estos animales. En España, las normas autonómicas difieren unas de otras, pero no se abordan medidas específicas sobre tenencia y protección de los animales.

Cataluña se ha convertido en la primera autonomía en prohibir los circos con animales salvajes y varios centenares de ayuntamientos en España también han prohibido las actividades circenses que tienen animales salvajes como reclamo. La federación de veterinarios de Europa aconseja su prohibición.