El Consell bipartito ha hecho balance esta mañana sobre el primer año de gobierno. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y la vicepresidenta, Mónica Oltra, se han mostrado satisfechos con el Trabajo hecho.

Pese a ese buen resultado, el año al frente del Consell no ha estado exento de dificultades. Por eso, Puig ha dejado entrever que el seminario del Consell en Torrevieja los próximos 9 y 10 de julio habrá cambios para "mejorar el engranaje". Oltra recordó que ya ha habido cambios en el Consell y defendió la Transparencia.

Respecto a la entrada de Podemos en el Consell, Oltra ha dicho: "Podemos no está en el Gobierno por decisión propia. No hay obstáculos pero tampoc presión para que esté".

Puig, ha reivindicado hoy que se trata de un ejecutivo de cambio, que ha mejorado "sensiblemente" la vida de los valencianos y que se caracteriza por ser transparente, honrado, trabajador y por estar cohesionado.

Puig se ha pronunciado así en el Palau de la Generalitat durante una comparecencia conjunta con la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, en la que ambos han analizado los "366 días de cambio" en la Comunitat y han reivindicado que se ha pasado "de la ocurrencia a la estrategia" y han puesto orden en las "minas" dejadas por el PP.

El president ha asegurado que no tienen "ni un ápice de satisfacción", porque el objetivo es mejorar siempre "todos los engranajes", y ha adelantado que quizá tenga que fortalecerse la "muy raquitizada arquitectura institucional" de la Generalitat para ganar fortaleza.

En el capítulo de la autocrítica, el president ha admitido que quizá un "error" ha sido no haber tenido en cuenta la "profundidad" de todo el "campo de minas" dejado por el PP, como los agujeros en Feria Valencia, la Sociedad de Garantía Recíproca o Ciudad de la Luz, pero ha anunciado una "política de reutilización de todos los elefantes blancos" del PP.

Puig ha admitido que quizá hay que mejorar cosas en la gestión, y para ello en el seminario de gobierno de Torrevieja analizarán de forma colectiva en qué se puede actualizar, si bien el president ya ha adelantado que las elecciones generales "no provocarán ningún cambio en el Consell", pero las aprovecharán para "mejorar".

Los cambios en el Consell se harán "de manera global y cuando toque abordarlos", ha enfatizado Oltra, quien ha recordado que ya ha habido cambios de directores generales y ha confesado que sus mayores "peloteras" son con el conseller de Transparencia, que pertenece a su coalición y además a su mismo partido.

Tanto Puig como Oltra han insistido en la cohesión del Consell bipartito, que según el president es "exponencialmente superior" al del anterior Consell, formado por un solo partido, y ha evidenciado que "el mestizaje funciona" y es "una buena idea" a exportar, porque ha alejado la visión de "dos gobiernos".

Puig ha recordado que al principio "nadie daba un duro" por la cohesión del Consell, pero ha superado ya dos elecciones generales y ha demostrado que el interés general está por encima del partidista, mientras que hay "muy buena relación" y "sintonía" entre sus integrantes, empezando por él y la vicepresidenta.

Oltra ha confesado que en estos momentos firmaría por seguir en un gobierno plural, y no en uno formado solo por su partido, porque eso da riqueza, amplitud de campo, "quita sectarismos y dogmatismos" y "aleja tentaciones" de confundir partido e institución, de manera que es "una fórmula de éxito, es tecnología política punta".

También han valorado la "lealtad" de Podemos en su apoyo parlamentario, y según ha asegurado Puig pronto habrá una reunión para la revisión del Pacto del Botánico, en la que podrán hablar "de todo".

Respecto a los logros alcanzados este año, Puig ha admitido que "posiblemente no son hitos revolucionarios", pero han conseguido mejorar la vida de la gente, y ha reivindicado que se ha demostrado que la Comunitat "ya no es el foco de atracción" por la corrupción o las malas prácticas, sino por una "gobernanza del siglo XXI".

El president de la Generalitat ha insistido en que la prioridad de su gobierno ha sido "rescatar a las personas" y devolverles derechos.