La portavoz del PP en las Corts, Isabel Bonig, reclamó ayer la comparecencia de todo el Consell en pleno agosto para que expliquen cómo afecta el decreto de no disponibilidad de gasto a cada una de las conselleries.

Los populares dieron ayer su versión sobre los recortes a los que se ha visto obligado el Ejecutivo valenciano. La vicepresidenta, Mónica Oltra, aseguró semanas atrás que se había negociado con el Ministerio de Hacienda «con una pistola en la cabeza». Ayer, el portavoz de Economía en las Corts, Rubén Ibáñez, concretó esos ajustes y aseguró que prácticamente la mitad, el 46,5 %, de los 78 millones de euros corresponde a partidas presupuestarias relacionadas con las políticas sociales.

«Recortes con nombre y apellido»

Según dijo, el 19 % de esa cantidad correspondería a Educación, cerca del 12 % a políticas sociales y otro tanto a Sanidad. «Los recortes tienen nombre y apellidos, y no se pueden ir de vacaciones sin explicarlos», aseguró Ibáñez.

El conseller de Hacienda y Modelo Económico respondió por la tarde al PP. «Es increíble que el Partido Popular pida explicaciones al Consell y no al ministro Montoro, que es quien ha forzado los acuerdos de no disponibilidad a sabiendas de que somos la comunidad peor financiada», indicó.

Además, Soler, acusa al PP de manipular las cifras del ajuste exigido por sus compañeros de partido. El Consell defiende que se trata de inejecuciones presupuestarias que solo afectan al 0,19% del presupuesto de Sanidad, el departamento al que menos impacta la medida, junto a Educación (0,36%), mientras que el más afectado es Presidencia (4%) y la media de las conselleries es el 0,60%.

Vicent Soler recuerda que el Ministerio de Hacienda exigía al Consell recortes por importe de 1.300 millones de euros y, tras semanas de negociaciones, se ha conseguido que el ajuste sea solo de 78,3 millones.

Pero Ibáñez detalla que son susceptibles de recortar cuestiones tan sensibles como el desarrollo del voluntariado, empobrecimiento infantil, ayudas de los ayuntamientos a inmigrantes o víctimas de violencia del odio, atención especializada en residencias, ayudas para diversidad funcional, servicios sociales en ayuntamientos, Xarxa llibres, becas de comedor o el programa de abandono escolar.

También reprocharon a Bonig que hable de recortes los portavoces de Compromís y PSPV.