A veces, cuando menos se lo esperan, los políticos valencianos reciben una carta del ministro de Hacienda y no se llevan un disgusto. Más bien al contrario. El ministerio acaba de publicar los datos de la liquidación en la participación de los tributos del Estado del año 2014 „siempre se finiquita dos años después„ y en esta ocasión llegan buenas noticias para la mayoría de alcaldes y los presidentes de las tres diputaciones.

Unos 450 de los 543 municipios van a recibir una liquidación positiva, unos cien millones en total. ¿A qué se debe? Sencillamente a que cuando el Ejecutivo elaboró su previsión de ingresos en 2014, contempló que esas localidades recaudarían menos dinero en impuestos del que finalmente ingresaron. Un síntoma de recuperación. O de que las previsiones del Gobierno eran más alarmistas que la realidad.

El resultado es sencillo. Ahora Hacienda les devolverá ese dinero que Madrid les transfirió de menos a través de las entregas a cuenta que se envían mensualmente. Es lo contrario de lo que ocurrió el año pasado, cuando los alcaldes se desayunaron en pleno agosto con que tenían que devolver cien millones por los cálculos erróneos de 2013.

No es el caso ahora. Las tres diputaciones son las más beneficiadas. La entidad de Valencia que dirige Jorge Rodríguez, por ejemplo, va a recibir 23,1 millones inesperados por la previsión a la baja del ministerio hace dos años. También la de Alicante recibe prácticamente 13 millones; y en Castelló, a la corporación que preside Javier Moliner llega un pellizco de 5,7 millones.

También los grandes ayuntamientos se van a encontrar con recursos extra para este año. Aquí la capital de nuevo es la que más va a recibir de Cristóbal Montoro, con casi 15,9 millones de liquidación positiva, según se desprende de los datos de la web ministerial. Todos los grandes municipios se encuentran con la misma situación. Gandia recibirá 772.270 euros. Y Castelló, 1,62 millones; al igual que Vila-real, con casi medio millón inesperado.

Este alivio veraniego llega tras una semana en que la relación entre las entidades locales y el ministerio ha vuelto a tensarse al límite tras las notificaciones que han comenzado a recibir en la que se les insta a cerrar las empresas públicas que se encuentren en desequilibrio financiero, en cumplimiento de la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local. En el caso de Valencia, se pedía el cierre incluso de la Entidad Metropolitana de Transporte (EMT).

Lo cierto es que las buenas noticias son generalizadas. En Castelló, por ejemplo, el cálculo del ministerio fue tan ajustado que en apenas 31 municipios se recaudó menos de lo previsto y el desvío total fue de solo 169.000 euros. Lo mismo ocurrió en Valencia, donde únicamente 23 municipios tendrán que devolver una cantidad agrupada de 132.000 euros.

Ha sido en la provincia de Alicante donde el cálculo de los técnicos de Hacienda se estrelló de forma estrepitosa con una realidad de crisis. Allí se concentra las principales cantidades a devolver. 39 municipios de esa provincia obtienen una liquidación a reintegrar, con una cantidad acumulada de 3,8 millones.

Como ya pasó con los cálculos erróneos de 2009 y 2013, el Estado concederá un plazo de una década a los ayuntamientos para abonar las cantidades cobradas de más.