Dos años después de que ocho ciudadanos rumanos murieran calcinados en una furgoneta en la autovía Alicante-Murcia a la altura de Cox, un accidente similar ocurrido ayer en Elx dejó otro trágico balance, cuatro personas fallecidas y tres heridas. Un camión frigorífico que circulaba por la A-7 hacia Murcia cruzó la mediana e invadió el sentido contrario, momento en el que chocó contra dos coches y aplastó a uno de ellos al tiempo que se incendiaban.

Cuatro ocupantes de los turismos murieron calcinados y dos mujeres pudieron ser rescatadas heridas, igual que el camionero, que saltó de la cabina cuando el camión estaba en llamas y pudo salvar su vida antes de quedar atrapado por el fuego. La Guardia Civil de Tráfico le hizo la prueba de alcoholemia al conductor del camión y dio negativo.

El accidente, ocurrido sobre las 13.15 horas, provocó retenciones kilométricas en ambos sentidos, especialmente en sentido Alicante, donde se formaron colas de más de cinco kilómetros y numerosos conductores tuvieron que esperar hasta 45 minutos para atravesar el punto del siniestro. Los problemas de circulación se prolongaron durante varias horas porque además de sofocar el incendio de los vehículos implicados, lo que obligó a cortar el tráfico, hubo que esperar a que se cortara una línea de media tensión para que pudiera trabajar la grúa que debía levantar el camión que aplastaba el coche donde viajaban tres de las cuatro personas fallecidas en el siniestro. En el otro vehículo contra el que chocó el camión viajaban un hombre que falleció y una mujer que pudo ser rescatada por unos ciudadanos.