Predecir un terremoto en un determinado lugar y en una fecha concreta es imposible. Lo que sí se puede prever, sin embargo, es la resistencia que deben tener las estructuras que se construyen en uno u otro territorio para paliar los efectos. La construcción en España se basa en los mapas de riesgo sísmico para aplicar la normativa sismorresistente de construcción, de ámbito estatal, que se aplica a rajatabla y cuyo cumplimiento es total, según el Colegio de Arquitectos de Valencia. De hecho, las directrices para la construcción en la Comunitat Valenciana son mucho más estrictas que en otras provincias con un menor riesgo de sufrir un terremoto. Es más, los arquitectos son los responsables de calcular la resistencia de las estructuras que construyen.

Los sismólogos cuentan con dos escalas de medición distintas que a veces se confunden: Magnitud e intensidad. La primera y más conocida, mide la energía liberada por un movimiento sísmico, la envergadura o lo grande que puede llegar a ser un terremoto. Se utiliza internacionalmente la escala Richter, que carece de límites superiores. Hasta ahora se han registrado en la tierra seísmos hasta la magnitud ?, pero teóricamente puede haberlos superiores. La intensidad es un concepto diferente, ya que lo que se mide con esta escala son los daños causados. Es una graduación que va de I a XII (en números romanos). El grado I supone la ausencia de daños y que la población ni siquiera perciba el terremoto. El nivel XII supone la destrucción total.

Intensidad de VI a X

Los grados de intensidad sísmica que afectarían principalmente a las provincias de Valencia y Alicante, en caso de producirse los terremotos más graves esperados (para un periodo de retorno de 500 años), serían desde VI hasta X. De hecho, de los 542 municipios de la Comunitat Valenciana, 327 „136 de Alicante y 191 de Valencia„ se encuentran en un nivel de intensidad menor o igual a VII; 76 localidades (5 de Alicante, 4 de Castelló y 67 de Valencia) en un grado menor o igual a VI y VII; por último, 139 pueblos con una intensidad menor a VI y se concentran en Castelló (135 localidades) y Valencia (266).

El president de la Generalitat, Ximo Puig, ofreció ayer toda la colaboración que esté al alcance del Consell para paliar los efectos del terremoto del centro de Italia. Puig envió una carta al embajador de Italia en España, Stefano Sannino, en la que le expresa su consternación y le traslada su apoyo para aportar toda la asistencia que sea necesaria.