Las declaraciones inculpatorias del exyonki del dinero, Marcos Benavent, y un certificado presuntamente falso que contradice la versión de una de las zombis de Imelsa arrepentidas han salpicado a los exdiputados provinciales del PSPV, Rafael Rubio y Raúl Pardos, y del PP, Salvador Enguix Morant, en la pieza separada del «Caso Taula» que investiga los contratos zombis en la empresa pública de la Diputación de Valencia. El juez que investiga esta macrocausa de corrupción, Víctor Gómez, comunicó ayer la imputación de los tres exdiputados provinciales y un asesor de la formación popular que deberán declarar el próximo 7 de octubre en la causa que investiga los presuntos delitos de malversación, prevaricación, tráfico de influencias, falsedad y fraude en la contratación, según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).

Tanto Rubio como Pardos fueron señalados por el exgerente de Imelsa, Marcos Benavent, como los representantes del PSPV-PSOE en la Diputación de Valencia que solicitaorn sus «favores» para contratar a «varias personas» en Imelsa. Aunque el exyonki del dinero no pudo precisar si «realmente trabajaban en Imelsa o en otra institución» ya que no eran personas de su formación política a los que él conociera personalmente. «Los consejeros [en Imelsa] de otros partidos me llamaban y yo contrataba a las personas que me pedían, pero cuando se nombraban ya no sabía nada más de ellos», según declaró Benavent el pasado jueves .

Fuentes del PSPV aseguraron ayer a la agencia Efe que tanto Rafael Rubio como Raúl Pardos formaban parte del consejo de administración de la empresa de la Diputación de Valencia pero «la toma de decisiones era del PP, que tenía la mayoría absoluta». Las mismas fuentes añadieron que Rubio y Pardos «colaborarán con la justicia y acudirán a declarar», al tiempo que mostraban la «voluntad de colaboración del partido». Actualmente, Rafael Rubio ejerce de coordinador de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia y Rafael Pardos es el alcalde Gestalgar (los Serranos).

La imputación del exdiputado de Cultura y exvicepresidente Salvador Enguix Morant viene motivada por la emisión de un certificado presuntamente falso sobre el trabajo de una «zombi» arrepentida. Enguix es el firmante de un informe en el que se certifica el trabajo real en Imelsa de Eva Luisa Sarrión Mira, que ocupó el puesto número 9 en la lista liderada por Alfonso Rus en Xàtiva. Sin embargo, Sarrión Mira admitió ante el juez que fue contratada en Imelsa sin la obligación de acudir a trabajar y, de hecho, se comprometió a devolver el dinero cobrado de forma irregular. Ante esta contradicción entre el certificado suscrito por Enguix Morant y el reconocimiento de los hechos por parte de una investigada, el juez ha decidido citar como investigado a Enguix Morant en la causa de los zombis para que aclare estos extremos. Enguix es el actual portavoz del PP en Beniarjó (la Safor) localidad de la que fue alcalde durante dos décadas (1995-2015). También fue el diputado de Cultura en la institución provincial que censuró la exposición Fragments de la Unió de Periodistes en 2010, por las imágenes que los fotoperiodistas incluyeron sobre Francisco Camps y el «Caso Gürtel».