Escola Valenciana ha asegurado que el borrador del decreto sobre el Programa Plurilingüe Dinámico (PPD) que propone la Conselleria de Educación «no responde al modelo» que esta entidad cívica defiende, ya que «establece niveles que no garantizan la competencia de las dos lenguas oficiales y el conocimiento efectivo de una lengua extranjera, un derecho fundamental para todo el alumnado del País Valenciano». No obstante, apunta que la futura norma «permite avanzar» ya que «reconoce, por primera vez, y de forma explícita, que los programas de enseñanza en valenciano son los modelos óptimos de aprendizaje».

La comisión de educación de Escola se reunió este fin de semana para valorar y definir propuestas de enmiendas al borrador del nuevo modelo lingüístico educativo que el departamento que dirige el conseller Vicent Marzà presentó el pasado martes. Hasta ayer, Escola -entidad de la que el conseller era miembro activo y de la que proceden miembros de su equipo de asesores de confianza como son Vicent Martínez, Francesc Felipe y, sobre todo Jaume Fullana, Director General de Política Educativa- no se había pronunciado respecto al proyecto de enseñanza plurilingüe.

Sí se había pronunciado, por ejemplo, el Sindicat de Treballadors de l'Ensenyament del País Valencià (Stepv), que el mismo día de la presentación del borrador criticó «la falta de valentía» del Consell del Botànic ya que «no cumple con los objetivos esperados de situar el valenciano como lengua vehicular de la enseñanza» y por mantener la exención del valenciano en las zonas castellanohablantes.

Frente a la contundencia del Stepv, solo el presidente de Escola, Vicent Moreno, se había pronunciado a título personal para señalar que «el único modelo que garantiza el dominio de las dos lenguas oficiales y del inglés es la enseñanza en valenciano», por lo que animaba a los centros a que no se queden en el Básico 1 (el que actualmente imparte todas las materias en castellano excepto el valenciano).

Eliminar el Básico 1 y 2

La propuesta presentada por Marzà propone un único programa plurilingüe dividido en tres niveles según la mayor o menor presencia del valenciano y el inglés. Aunque no obliga a estudiar más asignaturas en valenciano sí que prima aquellos centros que decidan impartir la mayoría de asignaturas en lengua propia y al meno un 30 % en inglés. De esta forma sus alumnos obtendrán de forma automática el certificado de B1 de inglés y el Mitjà de valenciano (que equivale al C1) al acabar el Bachillerato.

Escola presentó ayer una serie de modificaciones a este proyecto, que buscan principalmente la eliminación de los itinerarios en los que no se logre el conocimiento equilibrado de valenciano y castellano. Es decir, eliminar el nivel Básico 1 (17,9 % en valenciano y 59,6 % en castellano) y el Básico 2 (26,9 % en valenciano y 50,7 % en castellano).

Así, la entidad dibuja cuatro niveles, tomando de referencia la designación que el equipo de Marzà expone para el Decreto de Plurilingüismo: el Intermedio 1 tendría que ser el programa Básico, mientras que el Intermedio 2 seria, sencillamente, el Intermedio, y el Avanzado 1 y 2 continuarían siendo Avanzado 1 y 2, detalla la entidad en un comunicado. Se trata de un modelo mucho más acorde con el «modelo único de inmersión lingüística» que prometía Compromís en su programa electoral y que ahora el Consell ha descartado.

Escola recuerda que en noviembre la Llei d'Ús i Ensenyament del Valencià (LUEV) cumplirá 33 años, «tiempo más que suficiente para que Primaria haya incorporado progresivamente el valenciano a sus programas de enseñanza», aseveró ayer Vicent Moreno. El comunicado hecho público ayer subraya que Escola presentó el 26 de febrero de 2011 un informe que encargó a las Unidades de Educación Multilingüe que garantizaba la competencia bilingüe de todo el alumnado manteniendo el uso vehicular del valenciano siempre por encima del 50% en las áreas no lingüísticas. «En este sentido, los niveles que estén por debajo de este 50% no pueden lograr los objetivos del Decreto y, por lo tanto, no serían plurilingües», recordó ayer la entidad.

Para Escola, el borrador presentado por Marzà «ha sufrido las limitaciones de la ley Wert, así que una vez se derogue la LOMCE, solicitará una actualización del PPD».