El presidente de la Generalitat y líder de los socialistas valencianos, Ximo Puig, ha mantenido su postura de prudencia en las crisis del PSOE. Incluso después de los resultados de las elecciones vascas y gallegas, que ha calificado como «muy malos», considera que es momento de tomar «decisiones oportunas, pero con cabeza y lejos de frentismos y el subjetivismo radical».

El jefe del Consell se ha pronunciado sobre la situación del partido antes de la apertura de una jornada de UGT-PV sobre la financiación valenciana. Puig ha tenido que responder a la pregunta clave del momento: ¿debe el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, retirarse?

Su contestación no se ha movido mucho de su posición anterior a las elecciones del domingo. Ha apostado por un «debate sosegado», porque la cuestión, ha dicho, «no es de nombres», sino que «va más allá». Ha hablado de la reflexión sobre los problemas de socialdemocracia. «Es un momento de serenidad y prudencia», ha concluido.

Puig ha dicho que esperará a escuchar hoy la propuesta de Sánchez en la reunión de la comisión permanente de la ejecutiva socialista sobre una alternativa para formar gobierno, si bien él va «complicada». No obstante, «soy respetuoso. Vamos a ver qué plantea».

El president tiene clara una premisa de partida: «Hay que hacer un esfuerzo para que no hayan terceras elecciones. Creo que los ciudadanos no las quieren». A partir de ahí, «cada uno tendrá hacer lo que pueda», ha dicho.