Con pancartas, pitos y una sentada frente a la sede de la Delegación del Gobierno en Valencia, más de un millar de estudiantes de bachiller de 28 centros de la Comunitat Valenciana han reivindicado esta tarde la derogación del decreto que regula los exámenes de reválida, unas pruebas que, aseguran, solo traen "incertidumbre".

Así lo ha manifestado la estudiante de segundo de Bachiller en el IES Benlliure María Pascual, que ha participado desde el primer día en la creación de la Xarxa d'Instituts Valencians, una agrupación de alumnos de casi una treintena de institutos que ha convocado la concentración de esta tarde.

"A día de hoy no sabemos nada de la prueba que va a decidir nuestro futuro: ni temario, ni fechas, ni tipo de examen", ha denunciado la estudiante, que ha asegurado que el desconocimiento está generando "ansiedad y desazón" entre los alumnos.

María, que fue una de las participantes en la asamblea de este IES que se extendió a otros centros y dio lugar a la plataforma, ha asegurado que se trata de una reivindicación "sin partidos ni banderas" en la que "los alumnos son los protagonistas", con cifras de asistencia que varían desde los tres mil según los organizadores y los 500 según la Policía.

En este mismo sentido se ha expresado la coordinadora del Sindiat d'Estudiants del País Valencià, Isabel Aguilar, que ha explicado que la entidad no dudará en sumarse a cualquier movilización contra lo que, a su juicio, es una ley "completamente retrógrada", que recupera las "reválidas franquistas que imposibilitan el acceso a una vida digna a los hijos de las familias con menos recursos".

Aguilar ha considerado que los informes individualizados propuestos por Educación como alternativa a las pruebas son "una soberana tontería", pues, ha afirmado, "si realmente no vas a implantar estas pruebas, este tipo de proceso no tiene ningún sentido".

Algunos docentes, como la profesora de Valenciano en segundo de Bachiller en el IES Els Evols de L'Alcudia Lupe Canet, o el representante de la Federación de Enseñanza de CCOO Pau Díaz han querido sumarse hoy a la protesta organizada por sus alumnos.

"Me parece que (los responsables del ministerio) tienen muy poca vergüenza al valorar la calidad de la enseñanza con unas pruebas que son externas y cuyo objetivo último es segregar", ha criticado Canet, que ha asegurado que ha empezado el curso "angustiada" ante la falta de información.

Por su parte, Díaz ha subrayado que es "el momento de empujar para que el gobierno que se forme, sea el que sea, sepa que tiene que haber mayorías para derogar la LOMCE", al tiempo que se ha mostrado partidario de un pacto por la educación.

En este sentido lo han expresado también el responsable de Acción Sindical del STEPV, Marc Candela, para quien las reválidas pretenden "desviar a unos alumnos hacia fuera del sistema" y la secretaria general de FAPA Valencia, Esther Concepción, que las ve como una forma "de hacer guetos" y que ha puesto sobre la mesa "la insumisión de los gobiernos autonómicos, que tienen que ser fuertes y hacer boicot a la LOMCE".

"Hoy estamos peleando por nuestros hijos y nietos", ha añadido la representante de los Iaioflautas Consuelo Montesinos, a juicio de la cual "no hace falta tanto examen".

En cuanto a la representación política, al acto ha asistido la vicesecretaria de Educación de la Comisión Ejecutiva Nacional del PSPV, Inmaculada Sánchez, que ha apostado por prorrogar "por lo menos un año" la actual PAU y crear una nueva ley de educación "consensuada".