Renfe restableció el sábado el servicio del Cercanías entre Castelló y Valencia anterior al inicio de las obras del tercer hilo después de 15 meses de recortes. La Generalitat y los usuarios temen ahora que la línea volverá a reducir sus prestaciones una vez empiece a operar la línea del AVE entre Madrid, Valencia y Castelló, ya que recuerdan, la alta velocidad compartirá las mismas vías con el cercanías, mercancías y trenes de media distancia.

El proyecto del tercer hilo consiste en incluir un raíl en la actual doble vía ferroviaria existente que incorpora el ancho internacional y permite la circulación del AVE y adapta el tránsito de las mercancías a la red ferroviaria europea. Los empresarios y el Consell reclaman que se ejecute una doble plataforma exclusiva para pasajeros, pero el Gobierno optó por el tercer raíl justificando que es una propuesta más económica en los actuales tiempos de estrecheces económicas. Las obras del tercer hilo mermaron la línea del Cercanías desde que comenzaron en septiembre de 2015 hasta el pasado fin de semana.

Renfe ya ha recuperado el servicio original del Cercanías, pero sus usuarios y la Generalitat Valenciana dudan de que el AVE afecte de nuevo a la línea. En una na encuesta elaborada por una plataforma de viajeros del C6 en las redes sociales, más del 90 % de los participantes afirman que el tren de alta velocidad tendrá un impacto negativo en la línea C6. Las quejas de los viajeros por los retrasos fueron constantes durante las obras del tercer hilo. El Ejecutivo valenciano valoró en un millón de euros mensual el perjuicio económico general en la línea.

Fuentes de la Conselleria de Obras Públicas consideraron que el Cercanías sufrirá recortes con el AVE porque ambos tránsitos discurrirán por las mismas vías. Reiteraron que el servicio se vio disminuido por las obras al obviarse la ejecución de una nueva doble plataforma y recordaron que la alta velocidad entre Madrid y Castelló contará con un trasiego de cinco trenes diarios.

El Consell, añadieron las mismas fuentes, insiste en que la única solución plausible para hacer compatibles los tráficos ferroviarios pasa por construir la citada doble plataforma.

Además, el director general de Obras Públicas de la conselleria, Carlos Domingo, advirtió el viernes que el Cercanías no ha recuperado el servicio completo de antes de las obras. Explicó que el servicio de Civis de Castelló a Valencia dura ocho minutos más mientras otros trenes de Cercanías tardan 21 minutos más. «Han sido 15 meses de sufrimiento, de menosprecio a los viajeros. La Administración central no ha hecho caso a las demandas de los ciudadanos y del Consell como, por ejemplo, una bonificación del 50% del precio del billete o una mejor información», indicó el director general, que lamentó que «después de todos estos meses, el AVE de Madrid a Castelló seguirá sin llegar y aunque se han acabado las obras no tenemos ninguna fecha para su llegada, igual pasa con las mercancías hacía la frontera».

Respecto a las obras del tercer raíl, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) tiene pendiente la conexión con la estación de Valencia Joaquín Sorolla y trabajos de electrificación en las estaciones de Borriana-Alquerías del Niño Perdido y Villarreal, aunque destaca que esta actuación ya no afecta al tránsito ferroviario. El exministro de Fomento, Rafael Catalá, anunció en una visita a Puçol el pasado mes septiembre que el AVE conectaría Castelló a finales del primer trimestre de 2017. También ha e superar el preceptivo periodo de pruebas antes de inaugurarse.

Extensión al norte

El Ejecutivo valenciano y la Universitat Jaume I de Castelló también reivindican al Gobierno central la prolongación del Cercanías a Vinaròs. En 2010, el Gobierno central anunció la realización de un estudio previo para llevar a cabo esta actuación, pero los planes de austeridad paralizaron este proyecto.